Tartar de tomate, mejillón y berberechos
El tartar de tomate, mejillón y berberechos es un alimento refrescante. Anota el paso a paso de esta receta.
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El tartar de tomate, mejillón y berberechos es un plato del Mediterráneo. Aunque el tomate es de origen americano, se ha convertido en un ingrediente común en muchos alimentos típicos de la gastronomía europea. Por ejemplo, en las regiones costeras de España se acostumbra consumir pescados, mariscos y moluscos combinados con este fruto. Esto también sucede en Francia, donde se usa la fruta para completar carnes de diferentes tipos y elaborar el famoso “tartar”, muy popularizado en el país desde principios del siglo XX.
Se trata de una receta fácil de elaborar y se hace en pocos minutos. El único cuidado que debe tenerse es cortar las verduras del mismo tamaño para que se integren mejor en el momento de armar el tartar. Este alimento puede complementarse con una salsa tártara y servirse con pan tostado. Es realmente un plato versátil que se puede integrar en una dieta para bajar de peso.
Desde el punto de vista de una buena nutrición, el tartar de tomate, mejillón y berberechos es saludable. De hecho, la combinación de verduras y moluscos aporta una alimentación equilibrada y nutritiva. Las verduras son ricas en minerales como magnesio y potasio que fortalecen el mantenimiento de la masa muscular. Mientras los moluscos tienen un alto contenido de yodo, cuya ingesta frecuente estimula el sistema hormonal… ¡Lee lo que sigue!
Ingredientes:
Cómo preparar el tartar de tomate, mejillón y berberechos:
- Lavar muy bien las verduras y cortar en dados pequeños del mismo tamaño.
- Colocar las verduras picadas en un bol y mezclar.
- Limpiar el cebollino, cortar en rodajas finas y agregar a las verduras en el bol.
- Escurrir los berberechos y los mejillones, mezclar en un recipiente y rociar con el zumo de limón.
- Incorporar el perejil finamente picado a la mezcla de moluscos y salpimentar.
- Unir las verduras con los berberechos y los mejillones. Mezclar muy bien para integrar con el resto de los ingredientes.
- Poner a punto de sal y pimienta molida. Puede añadirse alguna hierba aromática, como es el caso de eneldo picado.
- Colocar porciones de la mezcla en moldes redondos, esparcir vinagre encima y apretar con la ayuda de una cuchara.
- Volcar cada molde en un plato individual y rociar con aceite.
- Decorar con una hoja de perejil.
- Servir.
Esta receta da un buen rendimiento para cuatro raciones. Es una preparación versátil que puede comerse como entrada en el almuerzo, como guarnición o como cena ligera. Como entrada también resulta espectacular, sírvelo y sorprenderás a todos … ¡A cocinar!