Receta de caramelo líquido
Con estos pasos conseguirás preparar caramelo líquido casero de forma fácil y rápida. Toma nota de estos pasos y ponte manos a la obra para poder crear esta delicia que se complementará a la perfección con todo tipo de dulces.
Preparar un caramelo líquido casero beneficiará en gran medida, además de nuestro paladar, al bolsillo, ya que resulta mucho más barato que comprarlo preparado. Este caramelo estará listo en un periquete y permite la posibilidad de incluirlo en muchas recetas de postres. Puede asustar un poco su elaboración si nunca lo hemos preparado, pero será mucho más fácil de preparar de lo que podemos pensar, siguiendo unos pasos básicos. Toma nota de cómo se prepara un caramelo líquido en un tiempo récord, con un aroma a limón que te encantará.
Ingredientes:
Cómo preparar un caramelo líquido
- El primer paso consiste en coger un cazo y calentar el agua. Mientras, en una sartén antiadherente o en otro cazo, a fuego medio, vertemos el azúcar y las gotas de limón. Mejor un cazo con un fondo grueso que reparta y transmita bien el calor. Cuando comience a formarse el caramelo añadimos el agua hirviendo, poco a poco y sin parar de remover.
- Mantenemos en el fuego, mezclándolo todo hasta que veamos que los elementos se han unido perfectamente. En ese momento, dejamos enfriar.
- Tenemos que vigilar bien todo el proceso, porque si no el caramelo podría quemarse, su color se volvería negruzco y su sabor amargo.
- En caso de que el caramelo haya resultado demasiado espeso, lo volveríamos a poner al fuego y añadimos agua hirviendo, muy poco a poco, para no pasarnos. Si, por el contrario, está demasiado líquido, lo volveríamos a calentar hasta que espese.
- Podemos guardar el caramelo en un envase y conservarlo en el frigorífico durante un par de semanas, teniéndolo a nuestra disposición en cualquier momento.
- El azúcar fundido puede llegar a alcanzar los 200º de temperatura. Por ese motivo, es necesario aplicar ciertas normas de seguridad cuando hagamos caramelo en casa. Debemos utilizar utensilios con el mango aislante ya que, con aquellos íntegramente metálicos podríamos quemarnos. También es aconsejable emplear la manopla. Si queremos probar el sabor del caramelo o guardarlo en un tarro, tenemos que esperar primero a que se haya enfriado un poco.
- El caramelo líquido va genial para endulzar crepes, helados, tartas, flanes o incluso para darle un toque diferente al café de todos los días.
- Si tenemos problemas para eliminar los restos del caramelo del cazo o de la sartén que hemos utilizado, lo lavamos con agua bastante caliente. También podemos optar por cubrirlo de agua y ponerlo al fuego durante un momento, lavándolo posteriormente.
Comentar
Consulta aquí la política de comentarios