Receta de Salmón marinado al horno
El salmón marinado al horno es un primer plato de lujo que se cocina muy rápidamente. Con unos pocos ingredientes encargados de darle al salmón un sabor de lo más intenso, conseguiremos un plato de restaurante.
El salmón marinado al horno es un plato muy completo y fácil de preparar. Entre sus ingredientes principales están los de una gama de sabores dulces y delicados que se mezclan a la perfección para crear un glaseado ideal. El salmón es un pescado azul que se convierte en el rey de la mesa, llegará para ser el protagonista de una comida de celebración. Si quieres encontrar la receta ideal para servir como primero en estas fechas, toma nota de este salmón marinado al horno. Con unas patatas o un puré tradicional el resultado será digno de un restaurante de lujo.
Ingredientes:
Cómo preparar un salmón marinado al horno
- Empezamos este delicioso primer plato de pescado prestando atención al marinado. Para darle un sabor intenso y a la vez delicado vamos a mezclar una serie de ingredientes muy especiales.
- En un cuenco ponemos la miel con la salsa de soja. Esos sabores que parecen enfrentados combinarán a la perfección entre ellos de tal manera que podrán crear una base principal de un marinado de lujo.
- Llega el momento de poner las especias, le añadimos la soja y el jengibre. Con media cucharada de cada uno de ellos ya será suficiente, si queremos darle prioridad a uno de esos sabores podemos ponerle un poco más de cantidad.
- El último de los ingredientes será el vinagre, un líquido de sabor contundente que hará de hilo conductor de este marinado. No debemos pasarnos con la cantidad porque puede eclipsar al resto de los sabores.
- Ponemos los filetes de salmón sin piel en una fuente para horno. Les añadiremos el marinado y dejaremos que reposen unos 15 minutos.
- Mientras marinamos el salmón encenderemos el horno para que esté listo a la hora de recibirlo y se cocine más rápidamente.
- Colocamos el salmón escurrido en una fuente para horno y lo horneamos a 190º unos 10 minutos, dependiendo del grosor puede tardar menos o más en estar preparado.
- Cuando veamos que ha cogido algo de color y esté cocinado lo retiramos el horno, no debe hacerse demasiado porque puede quedar seco.
- Serviremos el salmón acompañado de un sencillo puré de patatas y por encima le colocaremos unas semillas de sésamo para dale un toque crujiente. De esta forma tan sencilla tendremos listo un delicioso primer plato.
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