¿Se puede congelar el salmón ahumado?
Las fiestas de Navidad y las comidas de gala tienen un claro protagonista, el salmón ahumado, un pescado del que dudamos a la hora de congelar
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Las fiestas de Navidad y las comidas de gala tienen un claro protagonista, el salmón ahumado, un pescado del que dudamos a la hora de congelar. Nuestro congelador nos permite ahorrar, siempre y cuando que realicemos una compra inteligente y empecemos a preparar las comidas con antelación. Estos días de celebraciones y de reencuentros nos dan unos excedentes que podemos ir guardando para otros días peores que estarán por llegar. Si te ha sobrado mucho salmón ahumado, ha llegado el momento de pensar en congelar o en invertirlo en las últimas recetas de aperitivos o de canapés de estos días.
El salmón ahumado, un manjar ya cocinado
El salmón ahumado no es pescado crudo, está cocinado ya que se ha sometido al calor de un ahumado. Aunque se debe comer con moderación, no representa un riesgo para la salud, de la misma forma que lo hace comer pescado crudo. Todo pescado que se quiera consumir crudo debe previamente congelarse.
Las temperaturas extremas son las únicas capaces de acabar con algunas bacterias o parásitos que pueden crecer en estos pescados provocando más de un problema de salud. Especialmente los más vulnerables, niños y ancianos, no deben comer este tipo de pescado crudo, aunque si pueden consumir con moderación un ahumado.
Si les gusta es una manera de comer un pescado que es muy saludable, en este caso, estamos ante un ingrediente que nos costará mucho menos, teniendo en cuenta que es el más regalado y el que más se pone en la mesa estas fiestas. A la semana se puede consumir un máximo de 85 gramos de este tipo de salmón.
Una exquisitez que sí que podemos congelar, pero cumpliendo con unos requisitos que debemos tener en cuenta. Así es cómo puedes congelar el salmón ahumado.
Pasos para congelar el salmón ahumado
La cadena de frío no debe romperse en ningún caso, por lo que si tomamos la decisión de congelar el salmón no podremos descongelarlo y volverlo a congelar. Por lo que, es importante empezar a pensar en darle una vida larga a este salmón por partes. Deberás dividirlo en partes, raciones individuales para las comidas que tengas pensado hacer con ellas.
De esta manera podremos ir sacando del congelador el salmón a medida que lo usemos. Ya que una pieza grande, supone que solo podamos descongelarlo una sola vez. Es un elemento que debemos tener en cuenta, antes que nada.
Seguidamente, debemos preparar el congelado. Hay dos opciones que son igual de beneficiosas para este pescado. Por un lado, usar papel film. Simplemente enrollamos el salmón ahumado y lo vamos a congelar. Si quieres asegurarte bien, pon la fecha con un rotulador permanente o con un papel en el exterior lo puedes pegar con el mismo papel film.
La segunda de las opciones es hacerlo con un tuper que te permita colocar el salmón perfectamente aislado de cualquier elemento negativo. De esta manera se conversará y no sufrirá la contaminación con otros productos que tengas con el congelador o el propio hielo que se forma. Al igual que de la manera anterior. Debes poner la fecha de congelación para saber en todo momento la edad de ese salmón congelado.
Bien guardado en el congelador podemos extender su vida útil hasta 4 meses. Todo un logro si tenemos en cuenta que de otra manera estaríamos tirando este manjar desde ya mismo. Si te ha sobrado una buena cantidad de salmón ahumado, no lo dudes, empieza a congelar esta delicia para tenerlo disponible más allá de las fiestas. Es una buena forma de disfrutar de este delicioso y caro pescado.