Receta de Lenguados entomatados
Si te gusta comer pescado y buscas un plato un poco diferente, anímate a cocinar estos lenguados entomatados. Aquí te damos el paso a paso.
La inclusión de pescado en nuestro menú diario es una excelente idea para mantener a la familia sana. Sus propiedades nutritivas son muy interesantes, aunque, en algunos ingredientes como es el lenguado, el tema de su precio muchas veces lo aparta de nuestra mesa diaria. Sin embargo, entre febrero y abril, que es cuando se captura, su precio suele bajar un poco, permitiéndonos disfrutar de muchas recetas. Esta preparación de lenguados entomatados es original, sabrosa e ideal para toda la familia.
El aporte nutricional de este pescado plano es importante. Tiene 18 gramos de proteínas de alto valor biológico bastante mejor digeribles que las de otros animales, pocas calorías y es apta para quien tenga problemas estomacales; es rico en minerales, vitaminas y ácidos grasos omega 3. Su sabor lo convierte en un pescado muy apreciado en la cocina, con espinas grandes fáciles de quitar (perfecto para los niños).
Ingredientes:
Cómo preparar lenguados entomatados:
- Lavar los filetes y secar con papel de cocina. Salpimentar, regar los filetes con el zumo de limón y pasarlos por la harina.
- En una sartén poner un poco de aceite y freír un poco los filetes. Reservar.
- En una cazuela poner un poco de aceite, pochar la cebolla, el ajo y el pimiento, cocinar unos minutos.
- Añadir el tomate troceado y dejar cocinar hasta que casi todo esté deshecho. De vez en cuando se pueden aplastar los pedazos más grandes de tomate con una cuchara o un pasapurés.
- Es posible que haya que compensar la acidez de la salsa de tomate, con un poco de azúcar.
- Cuando la salsa de tomate esté hecha (que ya no se aprecien trozos grandes de tomate), agregar el pescado.
- Rectificar de sal y cocinar durante unos minutos a fuego medio y tapado.
- Servir inmediatamente espolvoreando perejil.
Es preferible que hagas la salsa de tomate y utilices tomates naturales, en lugar de purés o salsas ya hechas, porque por lo general le agregan más sal. Los lenguados entomatados quedarán perfectos en la comida o cena, porque cocinados de esta forma son bastante ligeros, a pesar de la harina y el aceite.
Si adquieres lenguados frescos, fíjate en su piel, que esté tersa y húmeda, y en el estado de sus agallas, y que huela a fresco. Es mejor comprar los que no midan más de 25 cm, y si consigues los más pequeños los puedes freír con piel (ten en cuenta que a los más grandes se les retira). Prepara este plato y acompaña con puerros al vapor, el contraste quedará muy bien.