Helado de fresa con queso y chocolate negro

Nada mejor que un helado de fresa con queso y chocolate negro casero para refrescar y endulzar tus días y también para sorprender a tu familia con un sabor delicioso y único. El helado, un postre que se creó por primera vez hace cuatro mil años en China con ingredientes a base de leche, crema suave, arroz, especias y hielo compactado, ha evolucionado muchísimo hasta convertirse en el delicioso producto que disfrutamos actualmente y que, cuando lo hacemos en casa, es aún más delicioso porque utilizamos solo los mejores ingredientes.

Esta receta, en especial, no solo es deliciosa, sino que además tiene ingredientes sumamente saludables para nuestro organismo. Las fresas, protagonistas de este helado, son una magnífica fuente de vitamina C, tiene un efecto antioxidante y ayuda a regular el tránsito intestinal. Adicionalmente, el consumo de fresa ayuda desinflamar el organismo y tiene un efecto depurativo muy positivo. De ahí que esta fruta se considera un aliado imprescindible para todas las personas que desean perder peso y al mismo tiempo disfrutar de un sabor tan exquisito como el de las fresas.

Por otro lado, el chocolate negro es ampliamente conocido por sus propiedades antioxidantes, además de otros compuestos beneficiosos para el óptimo funcionamiento del cuerpo. Es así como consumir unas onzas de chocolate negro ayuda a reducir la presión arterial y al mismo tiempo fortalece la salud cardiovascular. Adicionalmente, comer chocolate negro de forma moderada mejor el estado de ánimo en pocos minutos.

Ingredientes:

Cómo hacer el helado de fresa con queso y chocolate negro:

1. Comprar un recipiente especial para helados de paleta, los tradicionales polos.
2. Colocar en el vaso de la batidora las fresas frescas, quitándoles previamente el rabito o en caso de comprar fresas congeladas, sacarlas del congelador varias horas antes para que se descongelen por completo al momento de la preparación.
3. Agregar, también, al vaso de la batidora el queso crema y un poco de azúcar o endulzante artificial al gusto. Batir hasta obtener una textura suave y cremosa.
4. Llenar los recipientes de los helados con la mezcla anterior y llevar al congelador durante un tiempo mínimo de tres horas. Se pueden colocar los palitos de los bolos, cuando estén a la mitad del congelado.
5. Transcurrido el tiempo anterior, colocar en un bol apto para microondas el chocolate, la cantidad necesaria para bañar los helados. Derretir en el microondas en períodos de 15 segundos para evitar que se queme.
6. Colocar el helado en un plato, bañar con el chocolate derretido y volver a congelar.

Esta receta de helado es deliciosa y muy fácil de hacer, sin contar con que también es saludable, perfecta para darse un buen gusto sin remordimientos. Además, si quieres hacer una versión menos calórica, puedes sustituir el queso crema tradicional por el queso crema reducido en grasas. Es fácil, es rápido y es deliciosa, anímate a prepararlo.