Recetas de carne

Solomillo de ternera al horno jugoso: el plato ideal para celebraciones

Solomillo
Solomillo de ternera al horno.
Francisco María
  • Francisco María
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Un solomillo de ternera al horno tierno y jugoso, ideal para una comida especial sin complicarte.

Solomillo en salsa de la abuela

Solomillo de cerdo al horno Arguiñano

Solomillo al PX de arguiñano

El solomillo de ternera al horno es uno de esos platos que nunca fallan cuando tenemos algo que celebrar. Queda bien en una mesa elegante, pero también en una cena familiar donde lo importante es compartir. Quizá sea por lo tierno que resulta o por lo sencillo que es de preparar: no exige mil pasos complicados ni ingredientes rebuscados. Lo cierto es que, cuando una pieza de carne llega a la mesa brillante, jugosa y todavía caliente, la sensación es que el esfuerzo ha merecido la pena. Y con este corte concreto, el objetivo es ese: mantener la carne rosada, jugosa y con un sabor limpio que no tape su propia calidad.

La elección del producto

Para lograrlo, hay que pensar primero en la pieza. Lo ideal es un solomillo de tamaño homogéneo, sin partes excesivamente delgadas. Al no tener apenas nervios ni fibras duras, cualquier error de cocción se nota en seguida, porque la carne puede secarse antes de lo esperado. Por eso conviene no poner el horno demasiado alto ni pasarse con el tiempo. Es mejor quedarse algo corto y compensar ese punto con el reposo final. Ese reposo, envuelto en papel de aluminio, no es un capricho culinario: mientras la carne descansa, los jugos internos vuelven a colocarse donde deben, y cada loncha sale brillante, tierna y llena de sabor.Solomillo

Temperatura inicial

Otro detalle que marca la diferencia es la temperatura inicial. Si el solomillo sale de la nevera directamente al calor fuerte, irá por detrás todo el rato: frío por dentro, recocido por fuera. Así que conviene dejarlo reposar 20 minutos antes. Y, justo antes de meterlo al horno, no viene mal sellarlo en una sartén caliente. Ese sellado da una costra exterior dorada y aromática, fruto de la famosa reacción Maillard, que además actúa como barrera para que la carne mantenga su humedad. Luego solo quedará introducirlo en un horno a 180 ºC: entre 18 y 25 minutos suelen bastar si se busca un punto rosado, aunque la decisión final depende del gusto de cada casa.

Aromas y salsas

Los aromas acompañan, pero no deben convertirse en los protagonistas. Un toque de romero o tomillo suele funcionar bien, igual que un puñado de sal gruesa en el último momento. Si apetece un acabado más goloso, se puede preparar una mantequilla de hierbas mezclando mantequilla en pomada con perejil picado y un pelín de ralladura de limón. Al colocarla sobre la superficie de la carne recién salida del horno, se derrite sin secarla y le regala un perfume suave.

En las celebraciones se agradecen también las salsas. Una reducción de vino tinto, hecha con calma, es el clásico que nunca pasa de moda: cebolla pochada, un poco de caldo, mantequilla y paciencia. Si alguien prefiere sabores más suaves, una crema ligera de champiñones puede ser suficiente. Y quienes buscan algo con chispa agradecerán un chimichurri fresco, que limpia el paladar sin ocultar la ternera.

Acompañamientos y cómo servir

Los acompañamientos también juegan su papel emocional. Hay quien asocia este plato a las patatas asadas navideñas, otros prefieren un puré cremoso, casi mantecoso. A veces, una bandeja de chalotas confitadas convierte un corte de carne en un pequeño homenaje. Para mesas más desenfadadas, unas patatas panadera absorben el jugo y relajan el conjunto.

Y luego está el momento de la mesa. Puedes servir la pieza entera sobre una tabla y cortar delante de los invitados, lo que siempre arranca comentarios y sonrisas. En cenas pequeñas, es más práctico llevarla ya fileteada y acompañarla con una salsera al lado. En formato buffet, basta con mantenerla tibia y dejar que cada uno se sirva.

Cuando la carne se corta casi sola y el plato vuelve vacío hacia la cocina, sabes que has acertado. Ese es el valor de un plato así: sencillo, agradecido y capaz de convertir una fecha cualquiera en un recuerdo.

Tiempo de preparación: 60–75 minutos (incluye reposo)
Porciones: 4–6 raciones
Información nutricional: fuente alta de proteínas, hierro y vitamina B12; contenido elevado de grasas saludables si se cocina con aceite de oliva
Tipo de cocina: internacional / festiva
Tipo de comida: plato principal

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