Romanescu al horno gratinado

El Romanescu al horno gratinado es una tentación que se marca tendencia en nuestros tiempos. En realidad, el consumo de esta verdura se ha popularizado, convirtiéndose en un alimento imprescindible para una dieta saludable. Desde la antigua Roma este se ha consumido al dente, hervido en agua y sal. No obstante, ahora mismo se ha puesto de moda servirlo asado, frito acompañado con otros vegetales o gratinado. En Francia e Italia se acostumbra gratinarlo para acompañar carnes y pescados, mientras que en España es integrado con otras verduras en tortillas y paellas.

Este plato de Romanescu al horno gratinado es una preparación muy sutil. Realmente destaca por su pastoso gratinado, resultado de la mezcla del queso derretido y dorado enriquecido con el sabor de las verduras y la untuosidad de los lácteos horneados. Aun así, destaca el verdor característico del romanescu. Este plato ofrece una variedad de sabores y texturas agradables que retan al paladar.

El consumo de esta verdura fortalece las defensas y previene el estreñimiento. Esta variedad de col verde destaca por su alto contenido en fibra, vitaminas A, C, potasio y fósforo, cuya ingesta es muy importante para el funcionamiento equilibrado del organismo. Por esta razón, se recomienda incluirlo en la dieta, debido a que el ácido fólico que contiene fortalece el sistema inmunológico. A continuación, te indicamos como preparar este plato… ¡Sigue leyendo!

Ingredientes:

Cómo preparar Romanescu al horno gratinado:

1. Separar los ramilletes del romanesco y colocar en un bol con agua y sal durante 15 minutos.
2. Escurrir los ramilletes de col y colocar ordenadamente en una fuente para hornear.
3. Cortar el jamón en dados pequeños e ir poniendo encima de los ramilletes de romanescu.
4. Picar el puerro, los ajos y la cebolla finamente.
5. Rehogar los ajos y la cebolla en una sartén con aceite durante 5 minutos.
6. Incorporar la leche, la nata, los huevos, la sal, la pimienta y la nuez moscada a la preparación.
7. Remover hasta integrar todos los ingredientes y obtener una mezcla homogénea.
8. Verter esta mezcla sobre el romanescu y espolvorear el queso.
9. Poner a punto de sal el conjunto.
10. Hornear durante 25 minutos a 200 grados centígrados hasta que la preparación dore, pero con cuidado de que no se queme la costra que se formará de queso.

La versatilidad de este plato es inagotable. Esto se debe a que puede servirse como entrada en el almuerzo, como acompañante y hasta como desayuno.

El Romanescu al horno gratinado es ideal para complementar carnes asadas. Aunque, también puedes ingerirlo como una cena ligera… ¡A cocinar!