Gratinado de maíz y queso parmesano
Si tienes en casa unos granos de maíz de calidad y quieres preparar algo especial, atrévete con este gratinado de maíz y queso parmesano.
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Un gratinado de maíz y queso parmesano es una guarnición de lujo que bien puede servir también como una cena rápida, contundente y deliciosa. El sabor dulzón del maíz combina muy bien con preparaciones de carnes blancas, como pollo y otras aves similares, pero también con pescados a la plancha, donde el plato principal proteico no compite en sabor con el de la guarnición, sino que se complementan. Si no tenemos en casa queso parmesano, siempre se puede sustituir por cualquier otro queso duro rallado.
Esta es una receta muy sencilla de elaborar, y admite variaciones (como agregarle bacón, jamón serrano, patatas, pollo desmechado…) según la imaginación de cada cual. Se puede hacer tipo soufflé o quiche, o directamente gratinado con el parmesano. En cualquiera de estas versiones, el gratinado de maíz y queso parmesano es una delicia que, además, encantará a los más pequeños de la casa. Este cereal americano es muy nutritivo y una excelente fuente de energía. Además, es tan versátil que con él se pueden preparar muchísimas recetas igual de deliciosas. Es uno de esos alimentos que no deben faltar en ningún hogar.
Ingredientes:
Cómo preparar un gratinado de maíz y queso parmesano:
- Cortar la cebolla y el ajo en brunoise.
- En una sartén echar un chorrito de aceite de oliva y sofreír la verdura con la cucharadita de pimentón y la nuez moscada. Salpimentar al gusto.
- Cuando la cebolla esté pochada, agregar la crema de leche y la maicena disuelta en un dedo de agua. Mezclar y remover hasta que espese. Cuando tenga la textura deseada, retirar del fuego y reservar.
- Precalentar el horno a 180° C.
- En un bol grande mezclar la crema, el maíz y los dos quesos (reservar un poco de parmesano).
- Poner el conjunto a punto de sal.
- En un molde de horno previamente enmantequillado, verter la mezcla de crema y espolvorear con el parmesano
- Hornear durante 25 minutos a 180°.
Sirve este delicioso gratinado de maíz y queso parmesano como acompañante de carnes blancas cocinadas a la plancha, que queda muy bien. Si quieres convertir esta guarnición en otra cosa, añádele pollo deshebrado y bacon, con lo que ya sería un plato único para un buen almuerzo. Es un sabor que a los niños les encanta, por lo que bien podrías guardar esta receta como parte de menús infantiles.
