Receta de Tallarines de calabacín con salmón fresco
¿Qué te ha parecido esta receta de tallarines de calabacín con salmón? ¿Te animarías a hacerla en tu casa y compartir con nosotros fotos de tus platos?
Las pastas son una debilidad para mucha gente que intenta mantener una dieta baja en calorías. Y es que las recetas tradicionales están hechas a base de harina de trigo refinada, con un elevado contenido de carbohidratos. A continuación, te proponemos unos tallarines de calabacín y salmón, ideales para mantener la buena forma y aportar nutrientes esenciales a tu dieta.
El salmón es una de las mejores fuentes de ácidos grasos esenciales, en especial de omega 3. Como nuestro cuerpo no es capaz de producir estas grasas buenas, necesitamos obtenerlas a través de la alimentación. Además, contiene proteínas de alta calidad y más fáciles de digerir que las carnes rojas. A su vez, los calabacines aportan fibras, vitaminas A y C, ácido fólico, y minerales como hierro, manganeso y potasio. Sin mencionar que contienen mucha agua, ayudándonos a mantener una optima hidratación.
Ingredientes:
Elaboración:
- Para empezar a preparar nuestros tallarines, cortamos el salmón en trozos medianos. En seguida, los adobamos con el sésamo machacado y la salsa teriyaki, y dejamos reposar en la nevera por una hora.
- Pasado este tiempo, salteamos el salmón en una sartén con una cucharada de aceite de oliva a fuego fuerte. Cuando estén cocinados, apagamos en fuego y reservamos. Cuidado con este paso para no sobrepasarse en la cocción y resecar el pescado.
- Ahora, comenzamos a elaborar nuestra salsa cremosa. Lo primero que hacemos es lavar bien las flores de brócoli. En seguida, ponemos a cocinar al vapor por aproximadamente 15 minutos con una pizca de sal y pimienta al gusto.
- Una vez cocinadas, trituramos las flores de brócoli con la crema de leche en una procesadora o licuadora. Nuestra salsa esta lista, ahora la reservamos y nos dedicamos a los tallarines.
- Para hacer los tallarines de calabacines, será muy útil contar con la ayuda de una mandolina o un pelador. En este paso, necesitamos cortar láminas finas de calabacines. Luego, con un cuchillo bien afilado, cortamos cada lámina en tres o cuatro cintas gruesas. La idea es que el ancho sea similar al de un tallarín “verdadero”.
- Ahora, salteamos los tallarines con la otra cucharada de aceite de oliva y salpimentamos al gusto. Cuando se empiecen a dorar, añadimos el salmón y seguimos salteando durante unos cinco minutos más.
- Por último, añadimos la salsa de brócoli y seguimos salteando durante unos tres minutos, hasta que esté a temperatura deseada.
Nuestros increíbles tallarines de calabacín y salmón fresco están listos para degustarse. Nosotros servimos con un puñado de queso rallado sobre las cintas y unos tomatitos cherries cortados a la mitad.