Receta de sopa de tortillas mexicana

La receta de sopa de tortillas mexicana forma parte de la tradición culinaria de ese país centroamericano. Tal vez la idea de remojar tortillas en caldo no resulta tan atractiva cuando se lee, pero en realidad el resultado es delicioso.  En esta sopa se concentran algunos de los sabores característicos de la cocina mexicana: las tortillas de maíz, el chile, la crema agria y el tomate. Esta sopa suele servirse como entrante, aunque puede servirse también como una cena ligera.

La gastronomía mexicana ha sido declarada patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la Unesco. Este reconocimiento se basa en su variedad, su tradición y de su interesante historia. Sus sabores y aromas vienen del México prehispánico y de España principalmente, aunque pueden encontrarse elementos de África e incluso de Oriente. Gracias a este conjunto de características, la cocina mexicana ha conquistado el mundo entero.

Ingredientes:

Cómo preparar la sopa de tortillas mexicana:

1. Cortar la cebolla, el tomate, el pimiento y el chile en trozos pequeños. Picar muy finamente el ajo. Reservar por separado.
2. Calentar una sartén con una cucharada de aceite vegetal. Sofreír en orden, primero la cebolla y el ajo, luego el pimiento, el chile y el tomate. Sazonar con el comino hasta tener un sofrito consistente.
3. Calentar el caldo de pollo en la cazuela y agregar después de 15 minutos el sofrito, remover bien, tapar y dejar concentrar durante 10 minutos más. Probar y rectificar la sal de ser necesario.
4. En cada plato de sopa poner pollo desmenuzado y una ración de tortillas. Servir dos o tres cucharones de caldo sobre el pollo y las tortillas. Decorar con el aguacate y cilantro.
5. Si se desea que las tortillas no estén demasiado blandas, será necesario comer el plato en cuanto se sirva.
6. Rectificar el punto de sal.
7. Agregar limón, crema agria y queso tipo cheddar al servir.

Disfruta de una comida fuera de lo común y prepara esta deliciosa sopa de tortillas mexicana. La combinación de sabores y te textura te va a encantar. Ten un chile extra a la mano, pues siempre puedes aumentar los niveles de picante a tu gusto.