Receta de salpicón de pulpo con mejillones

Un buen salpicón de pulpo con mejillones es una de esas recetas perfectas para servir como entrante. Una forma ideal de conseguir llevar a nuestra mesa un producto muy apreciado. Con una buena cantidad de proteínas y pocas grasas, conseguiremos crear un plato a base de pulpo de excepción. Completaremos esta maravillosa ensalada fresca con un ingrediente especial, unos mejillones que le darán color y sabor a este plato. Acompañaremos este dúo ganador con los ingredientes propios del salpicón, el pimiento rojo y verde, cebolla y una buena cantidad de aceite y vinagre. Atrévete a provocar un salpicón que impresionará.

Ingredientes:

Cómo preparar un salpicón de pulpo con mejillones

1. El primer consejo para cocinar un buen salpicón es congelar el pulpo previamente. Si optamos por una pieza fresca la ponemos en el congelador previamente. Con esta manera de tratar la materia prima, conseguiremos que al cocerlo quede más tierno.
2. Descongelamos el pulpo y lo ponemos a cocer con un par de hojas de laurel agua y sal. Lo escaldamos tres veces para que quede mejor. Antes ponerlo en el agua caliente para cocerlo, se realiza este proceso. Tres veces lo ponemos en la olla un segundo y lo retiramos.
3. El pulpo tardará una media hora a estar listo. Dejaremos que se cocine poco a poco hasta que esté perfecto. Dejamos en la olla unos 15 minutos más para que se enfríe con todo su sabor.
4. Escurrimos y cortamos. Tal cual con un poco de aceite es un aperitivo impresionante, pero le daremos el punto de salpicón.
5. Ponemos los mejillones en un cazo tapado hasta que se abran. Retiramos de sus conchas y ponemos con el pulpo troceado.
6. Nos ponemos manos a la obra con las hortalizas. Pelamos la cebolla y la cortamos en tacos del mismo tamaño. Si no nos gusta cruda, podemos cocinarla 5 minutos en el microondas.
7. Quitamos las semillas de los pimientos y cortamos en trocitos del mismo tamaño. Estos ingredientes irán directamente al mismo bol en el que están el pulpo y los mejillones.
8. Salpimentamos al gusto. Añadimos una cucharada de pimentón y preparamos el aliño. Mezclamos el aceite y el vinagre, se lo añadimos a esta ensalada fresca deliciosa.
9. Servimos en frío con un vino blanco, tendremos listo el equilibrio perfecto de sabores y de texturas en un solo bocado.