Ensalada de corvina ahumada con rúcula y vinagreta de limón
Las ensaladas que preparamos en casa no tienen por qué ser aburridas. Como muestra, esta ensalada de corvina ahumada. Toma nota.
Corvina al horno
Corvina a la sal
Tacos de corvina con salsa de chipotle
Esta ensalada de corvina ahumada con rúcula y vinagreta de limón es apropiada para cenar. Esto se debe a que es un alimento sencillo y rápido de elaborar, al tiempo que es ligero y nutritivo. En la cena se deben consumir alimentos bajos en grasas y fáciles de digerir que aporten nutrientes. Por ello, las ensaladas se han convertido en una excelente opción para esta comida. El consumo de este tipo de platos se ha incluido en la dieta humana desde antes del siglo 600 a. C. Se cree que los persas incluían la ingesta de vegetales y frutos salados en sus comidas. Pero, actualmente existe una diversidad de “herbas salatas” que se sirven como entradas, guarniciones o cenas. Esta receta indica cómo hacer una de las más consumidas en España.
La vinagreta de limón y miel aporta un sabor único a esta preparación. En realidad, esta es una emulsión de uso común en los países europeos. En ella se sustituye el vinagre por el zumo de limón, lo cual suaviza el sabor ácido y astringente de este aderezo.
El consumo de esta ensalada de corvina ahumada con rúcula y vinagreta de limón aporta proteínas saludables. Por otro lado, la corvina es uno de los pescados de carne blanca con mayor valor nutricional, por su alto contenido en calcio y fósforo. Es un alimento bajo en grasas, cuya ingesta facilita el control del colesterol. Aprende a cocinar este plato… ¡Lee cómo hacerlo!
Ingredientes
Cómo preparar la ensalada de corvina ahumada con rúcula y vinagreta de limón:
- Lavar bien los tomates y cortar por la mitad. Reservar en un bol.
- Cortar las hojas verdes con la mano para evitar que se oxiden e incorporar con los tomates.
- Cortar en lonchas la corvina ahumada (en tiendas especializadas las encontraremos ya así), cortar en dados medianos y añadir a la preparación. Mezclar y reservar.
- Verter el zumo de limón, la miel y la mostaza en un recipiente para hacer la vinagreta. Mover y emulsionar bien para obtener una mezcla homogénea.
- Incorporar la sal, la pimienta y el aceite en el recipiente. Batir para emulsionar.
- Añadir la ralladura en la emulsión para aromatizar y corregir la sal.
- Verter la vinagreta sobre la ensalada y mezclar con cucharas para ensalada.
- Servir en templado el plato.
Esta preparación de consumo común en los días cálidos se puede comer durante el invierno. Se trata de un aliento versátil que funciona como entrada. La ensalada de corvina ahumada con rúcula y vinagreta de limón se prepara en 10 minutos. Consúmela como tu última comida del día… ¡A cocinar!