Brazo de gitano de queso crema y calabaza

Un postre ideal para endulzar las tardes otoñales es el brazo de gitano de queso crema y calabaza. Se trata de una receta sencilla, con todos los secretos para que el bizcocho no se rompa y quede perfecto. La suavidad del relleno de queso crema y la dulzura de la calabaza combinan estupendo para disfrutar junto a una humeante taza de té.

Este postre de masa enrollada con un cremoso relleno tiene un nombre curioso. La teoría más aceptada sobre su origen cuenta que en los años 50, recorrían las pastelerías artesanos caldereros de la etnia gitana, ofreciendo sus servicios. Como recompensa por su trabajo los pasteleros juntaban restos de bizcochos, los aplastaban y enrollaban y se los daban.

Al verlos partir con el bizcocho acomodado en el brazo exclamaban: ¡Qué bien queda el pastel en el brazo del gitano! Este dicho se popularizó tanto que le dio nombre al postre que hoy todos conocemos.

Ingredientes:

Para el bizcocho:

Para el relleno:

• 250 gr de queso crema tipo philadelphia
• 170 gr de azúcar glas
• 60 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
• ½ cucharaditas de esencia de vainilla

Preparación de brazo de gitano de queso crema y calabaza:

1. Precalentar el horno a 170°y colocar papel para hornear en la placa a usar.
2. Batir el azúcar y los huevos hasta que quede una mezcla espumosa y pálida. Incorporar el puré de calabaza suavemente. Añadir por tandas la harina tamizada con el bicarbonato y la canela.
3. Unir con movimientos envolventes hasta que quede todo integrado.
4. Colocar la mezcla en la placa y llevar al horno durante 10 minutos.
5. Retirar del horno y desmoldar sobre otro trozo de papel espolvoreado con azúcar glas. Quitar el papel de la cocción y enrollar con cuidado. Dejar enfriar.
6. Para el relleno, batir la mantequilla con el azúcar glas. Cuando estén bien integrados agregar el queso crema y la esencia. Seguir batiendo hasta que la crema quede suave y brillante.
7. Desenrollar el bizcocho, quitando el papel. Con espátula cubrir toda la superficie con la crema de queso. Enrollar nuevamente con cuidado presionando en cada vuelta. Colocar en una fuente y llevar al refrigerador hasta la hora de servir, espolvoreado con azúcar glas. 

El brazo de gitano de queso crema y calabaza es tan tentador que nadie podrá resistirse cuando le ofrezcas una porción. ¿Te animas a cocinarlo?