Receta de pastel rápido de atún con bechamel

Este pastel rápido de atún con bechamel es una auténtica maravilla muy fácil de cocinar. El atún en lata es uno de esos ingredientes que está muy presente en nuestra cocina. Se trata de una forma muy cómoda de comer pescado, solo abrir la lata, escurrir y servir. Este complemento de ensaladas y salsas, puede ser el auténtico protagonista de un plato con mucho sabor. El pastel rápido que vamos a cocinar estará marcado por la cremosidad de la bechamel, un ingrediente que conseguirá darle al atún la suavidad necesaria. Atrévete a probar un pastel de atún con bechamel que impresiona.

Ingredientes:

Cómo preparar un pastel rápido de atún con bechamel

1. Esta sencilla es tan fácil de preparar que podrás hacerla en 5 minutos, de tener la bechamel ya lista o comprarla. Es una solución de emergencia que queda deliciosa para esos días en los que la actividad es una constante.
2. Empezaremos con la bechamel. Ponemos en un cazo dos cucharadas soperas de mantequilla. Esperamos a que se funda para añadirle la harina, podemos poner uno o dos cucharadas, dependiendo de cómo nos guste de espesa. Para un pastel, mejor que quede contundente.
3. Tostamos la harina durante 2 minutos. Pasado este tiempo añadimos poco a poco la leche. Sin dejar de remover vamos mezclando hasta que esté perfectamente integrada. En ese momento salpimentamos y añadimos una pizca de nuez moscada.
4. Seguimos batiendo los huevos. Cuando estén batidos les incorporamos un poco de queso rallado, podemos dejar un poco para decorar.
5. Escurrimos el atún. Para este tipo de recetas mejor que sea al natural, nos quedará un pastel más suave, el aceite podría ser demasiado intenso. Incorporamos el atún a los huevos y queso. Salpimentamos al gusto.
6. A esta base le añadimos poco a poco la bechamel. Mejor que esté fría o templada para que nos huevos no se cuajen antes de tiempo.
7. Preparamos la fuente para horno. La untamos con mantequilla para que no se nos pegue la masa. Tendremos listo el horno a 180º.
8. Ponemos la masa en el molde. Decoramos con un poco de queso y taquitos de mantequilla. Horneamos a 180º unos 15 minutos, hasta que se haya dorado un poco por encima. Tendremos listo uno de esos platos que destacará por su sabor y textura, un básico que no podemos dejar escapar.