Receta de Granizado de fresa y sandía para el verano

¿Hay algo más delicioso que un granizado en un tórrido día veraniego? Pues el granizado de fresa y sandía para el verano pretende bajar las altas temperaturas y hacer que cualquiera disfrute de una bebida helada en esas tardes de calor pegajoso e incómodo. En España, la costumbre de tomar granizados es de larga data, y es habitual conseguirlos en cafeterías, heladerías, bares y horchaterías.

Los granizados más comunes aquí son los de limón, los de café y la horchata, pero se pueden hacer literalmente de cualquier fruta, raspando el hielo o troceándolo en las máquinas especiales, las granizadoras. Se parece mucho a un sorbete, y, de hecho, en algunas partes se confunde. Los chinos, hacia el 3000 a.C., mezclaban la nieve con diversas frutas, y los faraones la bebían en copas de plata. Los antiguos romanos, algunos siglos después, hacían lo mismo, añadiéndole miel para endulzar.

Este granizado que presentamos ahora es muy refrescante y nutritivo. La sandía está llena de agua y sabor, así como las fresas. Estas contienen antioxidantes y fibra, y comer 2 fresas diarias es perfecto para la salud cardiovascular. En cuanto a la sandía, es depurativa, rica en agua y también es antioxidante, por lo que este granizado es muy efectivo como nutriente.

Ingredientes:

Cómo preparar un granizado de fresa y sandía para el verano:

1. Lavar la sandía. Pelarla y cortarla en trozos, hasta llegar a 600 gramos.
2. Retirarle todas las semillas. Triturarla en un procesador de alimentos.
3. Traspasar a una jarra. Reservar.
4. En el mismo vaso del procesador triturar el hielo, pero antes echar la pizca de sal, la cucharada de aceite de oliva y la miel.
5. A continuación, agregar el helado de fresa y triturar de nuevo.
6. Servir en vasos el triturado de sandía y agregarle una parte del de fresa.
7. Adornar con hojas de menta.

Si lo prefieres, mezcla en el procesador la sandía triturada con el helado de fresa y el hielo, si prefieres que todo esté más homogéneo. También puedes echar algunas fresas enteras o congeladas. Niños y grandes te agradecerán esta preparación, que se hace rápido y es muy resultona en los días de mayor calor. Nuestro consejo es que una vez hecho, sirvas de inmediato para que el hielo no se derrita.