Palomitas de maíz caseras para disfrutar de una buena película
Las Palomitas de maíz caseras no tienen nada que envidiar a las que venden en los cines. Aquí te contamos cómo hacerlas en casa.
Las palomitas de maíz caseras pueden ser tan buenas como las que venden en el cine. De hecho, estas suelen ser más saludables que las de sobre que se preparan en horno microondas. En la práctica, las famosas popcorn han sido probadas incluso por civilizaciones antiguas. Por ejemplo, en México se ha encontrado evidencia de este alimento que data de unos 3500 años antes de cristo. Los indígenas latinoamericanos habrían explotado granos de maíz desde tiempos remotos.
En los cines se exhiben freidoras gigantes en las que se preparan grandes cantidades de palomitas de maíz. No obstante, lo único que se necesita para freírlas es un sartén casero con tapa y aceite. Por supuesto, existen algunas técnicas y trucos para evitar que estas quemen. Es posible que en las primeras ocasiones no queden muy bien si no se conocen algunos principios básicos de la receta.
Las palomitas de maíz caseras son un aperitivo muy saludable. Podría parecer que este es un alimento grasoso porque incorpora cierta cantidad de aceite para su elaboración. No obstante, este es uno de esos tentempiés que los entrenadores de fitness aconsejan para controlar la ansiedad entre comidas. La realidad es que este es un producto alimenticio muy bajo en calorías. Por ello, permiten generar sensación de saciedad sin comprometer el peso de quienes entrenan. A continuación, te enseñamos los mejores trucos para hacer las mejores popcorns caceras… ¡Sigue leyendo!
Ingredientes:
Cómo preparar palomitas de maíz caseras:
- Calentar el aceite de girasol en una sartén amplia con tapa a fuego alto.
- Colocar un grano de maíz para corroborar que el aceite esté bien caliente.
- Esperar a que el grano de prueba chispee y salte para comenzar la cocción.
- Echar el maíz en la sartén repartiéndolo por toda la superficie.
- Bajar la intensidad de la llama a término medio.
- Colocar la tapa de la sartén y esperar a que todas las palomitas de maíz exploten.
- Apagar el fuego e incorporar la sal removiendo las palomitas con las manos.
Es fundamental que todos los granos de maíz queden bien extendidos sobre la sartén y cubiertos de aceite. De lo contrario, ocurrirá que algunas palomitas de maíz quedarán quemadas mientras que otras ni siquiera explotarán. A los más pequeños de la casa les encantará la experiencia y colaborarán en ello, lo que puede ser una tarde cocinando en familia.8