Ni huevo ni harina: el truco de Karlos Arguiñano para que los calamares queden como en los restaurantes

Karlos Arguiñano es uno de los mejores cocineros de nuestro país, de su cocina, libros y restaurante salen unos trucos infalibles, como este para cocinar los calamares. Una de las tapas más auténticas de nuestra cocina que necesita un poco de atención para que quede perfecta. Tener una buena materia es fundamental para cualquier cocina, pero no debemos olvidar disponer de una serie de ingredientes que deben ser los que marquen un antes y un después. Una buena opción que nos aporta Karlos Arguiñano en su libro, nos apasionará.

Habrá llegado el momento de empezar a prepararnos para cocinar un plato que puede ser el que marque una diferencia importante en todos los sentidos. Por lo que, debemos tener en cuenta que estamos ante una receta sencilla, pero que tiene sus complicaciones. Es el momento de hacer realidad un plato que puede convertirse en nuestro mejor amigo en una cena de tapas caseras. Nunca antes unos calamares no nos han quedado tan buenos, gracias a Karlos Arguiñano conseguiremos una receta de esas que pone los pelos de punta, que hace saltar lágrimas y emociona, nada más escuchar un crujiente inconfundible.

Ni harina ni huevo

Los libros de Karlos Arguiñano, al igual que su programa de televisión, han ayudado a miles de personas. En ellos es capaz de despertar la pasión por la cocina, de darnos mil y una receta especial para casi cualquier día de la semana, de hacernos sentir especialmente conectados con unos alimentos que pueden cambiarlo todo.

Pero en esencia, estaremos ante una comida que se prepara con el corazón. Lo mejor de Karlos Arguiñano es que recupera recetas caseras de toda la vida y las difunde, para que todos podamos recordar esos tiempos en los que todo parecía mejor. Hoy en día estamos ante una situación que nos hace recurrir de nuevo a tiempos pasados.

A esos días en los que deberíamos degustar una buena tapa casera o al menos intentarlo. Unos calamares caseros se notan, en casa o fuera de ella, se convierten en ese básico que nos hara descubrir un plato de esos que pueden ser claves y que nos dará más de una alegría. Atrévete con un tipo de receta que acabará siendo el que marque una diferencia importante en todos los sentidos.

Este es el truco de Karlos Arguiñano que hará que tus calamares queden de restaurante

Los restaurantes cuentan con ventaja, ellos son expertos en cocina y en casa, por mucho que lo intentemos, no hemos pasado las suficientes horas para hacer realidad esa combinación de ingredientes que necesitamos. Algo tan básico como unos calamares rebozados puede ser básico.

Lograremos un tipo de bocado digno de los dioses, con ese crujiente que penetra en nuestro interior y nos hace hasta emocionarnos. El secreto de un buen rebozado es casi tan variado como cocineros hay en nuestro país, cada uno, es capaz de hacernos disfrutar de su propia receta.

Pero Karlos Arguiñano nos da un truco básico, no incluir la harina, es decir, rebozamos con el pan rallado y el huevo, de esta manera conseguimos un rebozado más ligero y unos calamares que quedan con el punto justo de crujiente, algo que puede hasta cambiarnos la forma de cocinar todo tipo de rebozados. El paso de la harina puede incluir una textura más cargada, es cuando los calamares, solo con dos ya parece que hayamos comido medio plato de lentejas.

La idea de comer este tipo de ingredientes, a pesar de que estén rebozados, es incluir una base más ligera, huyendo de las croquetas o de las carnes. Para que sean ligeros de verdad, nada mejor que eliminar un ingrediente que puede hacerlo más pesados de lo que deberían ser.

Acompañar los rebozados de un chorrito de limón también puede ser un buen aliado para hacernos descubrir que estamos ante un tipo de bocado de esos que enamoran a simple bocado. Hazte con unos buenos calamares frescos, los pueden limpiar y cortar en la pescadería para que nos queden perfectos.

Solo descubriremos esta técnica y todo lo bueno que nos ofrece cuando la pongamos en práctica. Atrévete a cocinar unos calamares de restaurante, con un truco para que queden más crujientes, podrás descubrir una manera de cocinar que puede acabar siendo la definitiva.

La cocina es un arte que nos permite innovar y descubrir nuevas formas de cocinar algo tan básico como este tipo de rebozados que acabarán siendo nuestros mejores aliados. Hazte con estos trucos y muchos otros, a través de los libros de cocina o las formas de descubrir un tipo de platos que pueden marcar una diferencia importante en todos los sentidos. Estas recetas son realmente espectaculares y fáciles de preparar.