Salsa cuatro quesos
La salsa cuatro quesos es una receta ideal para los amantes de este producto lácteo. No solo la podemos utilizar para preparar una pizza casera o catapultar hacía lo más alto a una receta de pasta convencional, también podemos tenerla lista para picar entre horas. El queso combina tan bien con todo tipo de ingredientes, que la podemos utilizar en cenas informales como entrante con un poco de zanahoria, apio o pan frito como acompañamiento. Una receta versátil plagada de sabor que no puedes dejar escapar, si quieres conocer a la reina de las salsas cuatro quesos, toma nota de estos pasos, seguro que la vas a disfrutar.
Ingredientes:
Cómo preparar una salsa cuatro quesos:
- Empezaremos nuestra salsa cuatro quesos pelando y picando la cebolla bien finita. Este ingrediente nos dará ese punto de dulzor frente el salado de los quesos. La reservaremos mientras seguimos.
- Le toca el turno a los quesos. El roquefort, cabrales o azul, son una gama de quesos con un sabor parecido. Podemos escoger el que más nos guste, en este caso para darle ese toque especial pondremos un poco de roquefort. Esta gama de quesos se desmenuza bien, es tan suave que no se puede rallar.
- Seguiremos con el emmental y el de cabra, su textura hace que mejor los cortemos, son mantecosos y difíciles de rallar. Los iremos reservando a medida que los vayamos preparando. También podemos poner un gruyere es un queso que encajaría bien con el resto.
- Por último, rallaremos el parmesano, uno de los quesos más intensos que existen. Tendremos listos los protagonistas de la salsa.
- En una sartén ponemos un poco de mantequilla y empezamos a dorar la cebolla. Salpimientamos al gusto para que quede perfecta.
- Cuando esté tierna pondremos el queso parmesano y el brandy. Lo flambearemos todo para que coja un ligero sabor ahumado muy interesante.
- A continuación, pondremos la nata liquida y mezclaremos muy bien. incorporamos el resto de los quesos sin dejar de remover.
- A medida que se vaya calentando, se irán deshaciendo, dando lugar a una salsa con una textura consistente. Cuando todos los quesos estén integrados tendremos lista la salsa de cuatro quesos. Podemos servirla en un bol o integrar en otro plato, como una carne a la parrilla o unas verduras al horno, estará deliciosa.
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