Lemon curd o crema de limón: receta casera

El lemon curd o crema de limón es un postre tradicional que vale la pena probar. En Inglaterra esta propuesta se popularizó durante el siglo XIX. Sin embargo, la tradición de realizar cremas a base de frutas existe en muchos países. Podría decirse que este es uno de esos dulces caseros que solo las abuelas saben hacer. No debe extrañar el parentesco que existe entre esta preparación y el pastel de limones. En la gastronomía inglesa se dominan ambas recetas a la perfección.

La crema de limón requiere de algunos ingredientes cremosos para lograr su consistencia. En este sentido, el ingrediente que más destaca es el huevo. En este caso se utiliza solo la yema precisamente para obtener un alimento con mayor cremosidad. De igual manera, es fundamental añadir un poco de mantequilla. Esta receta se prepara en baño de María y debe ser batida constantemente.

El lemon curd o crema de limón es un postre natural, ligero y alimenticio. A decir verdad, pocos dulces tienen una composición que combine tantos atributos positivos. Básicamente, esta crema aporta proteínas y no tiene ningún carbohidrato dentro de su lista de ingredientes. De igual forma, este alimento entrega grasas a partir de la mantequilla, pero en cantidades moderadas. Lo mejor es que no requiere de mucha azúcar para garantizar un buen sabor. A continuación, verás cómo se prepara esta receta de origen ingles… ¡Sigue leyendo!

 Ingredientes:

Cómo preparar Lemon curd o crema de limón:

1. Rallar la piel de uno de los limones y reservar.
2. Sacar la mantequilla del frigorífico y mantener a temperatura ambiente.
3. Calentar agua en una olla especial para hacer baño de María a fuego alto hasta que rompa en hervor.
4. Añadir las yemas de huevo, el azúcar, la ralladura de limón, el zumo y un toque de sal en la olla superior del baño María.
5. Batir todos los ingredientes mientras se cocinan a fuego bajo y mantener la cocción durante 10 minutos.
6. Sacar la mezcla del fuego e incorporar la mantequilla para que se derrita en la crema.
7. Colocar la crema en un recipiente y tapar con papel film. Dejar enfriar.
8. Refrigerar la crema de limón una vez que esté en temperatura ambiente.

Es importante batir los ingredientes durante toda la cocción a baño de María. Precisamente, esto es lo que permitirá que la mezcla se espese. El resultado debe ser una crema sin grumos, muy agradable al paladar, homogénea y lleva de un exquisito sabor a cítricos.