Receta de Curry de garbanzos con frutas tropicales
Si estás buscando una receta lleva de sabor y con un punto bien exótico, apunta los pasos de este curry de garbanzos con frutas tropicales.
El curry de garbanzos con frutas tropicales es una deliciosa alternativa para preparar una receta vegana con todo el sabor y nutrientes necesarios. Es un plato versátil que conquista al paladar más exigente, y cuando se acompaña de mango o piña –frutas tropicales por antonomasia– el resultado es sencillamente impactante. Además, es una excelente forma de variar un plato tan contundente como lo es el curry. A los más pequeños de la casa les gustará este sabor, les parecerá divertido, y de esa forma se animarán a disfrutar de los nutrientes de estos ingredientes.
Este condimento originario de la India tiene una larga historia. Su nombre proviene del vocablo tamil kari, que señalaba platos preparados con salsa (pero no la salsa en sí); a los platos secos se les decía tari. Quien haya probado un buen curry sabe que tiene un aroma y un sabor intensos, penetrantes y de mucha presencia. Originalmente era una pasta hecha con las hojas del árbol de kari, que se usaba tradicionalmente en la India, y cuando el imperio británico colonizó aquella región, los ingleses quedaron maravillados con aquel condimento.
De esta forma, los ingleses intentaron comercializar el curry, pero no pudieron porque el aroma de las hojas se perdía rápidamente; decidieron mezclar las hojas de kari con otras especias, y aunque aquella mezcla resultó exitosa y rica, se parecía poco al kari original. El curry era una pasta, y no un polvo como se presenta hoy en día, y se utiliza de esa forma aún en Tailandia y Japón. A lo largo del tiempo la combinación de especias ha variado, y actualmente se podría decir que casi cada cocinero tiene su propia manera de hacer curry.
Presentaciones y variedades de curry
El curry puede presentarse en polvo y en pasta, y aunque hay muchas variaciones, igual hay un punto de partida; el curry en polvo suele llevar cúrcuma, comino, jengibre en polvo, canela, semillas de cilantro, nuez moscada y muchas especias más. El curry en pasta, además de lo anterior, también puede llevar albahaca, menta, raíces de cilantro, jengibre y cúrcuma, pasta de pescado fermentado, cítricos y leche de coco. Existen tres tipos de curry, el indio, el tailandés y el japonés.
El indio se presenta en polvo y es la combinación de diversas especias. El tailandés es más bien como una pasta de color rojo, verde o amarillo. El japonés es un bloque prensado de pasta que se disuelve en las salsas, a modo de las pastillas de caldo concentrado, aromatizantes. Es un condimento potente que hay que usar con moderación, y sirve para realzar todas las recetas, como este curry de garbanzos con frutas tropicales.
Ingredientes:
Cómo preparar el curry de garbanzos con frutas tropicales:
- Picar muy pequeño los ajos, el jengibre y la cebolleta (se puede triturar).
- Lavar las verduras y cortarlas en bastoncitos.
- Retirar la pulpa del mango y picar en trozos muy pequeños (se puede triturar, debe quedar cremosa).
- En una sartén o cazuela bastante amplia, calentar dos cucharadas de aceite con el comino, el cilantro y las hojas de laurel hasta que suelten sus aromas.
- Añadir la pasta triturada de ajo, cebolleta y jengibre y remover bien a fuego bajo por 10 minutos.
- Agregar las verduras, salpimentar ligeramente el curry.
- Saltear a fuego medio durante 5 minutos.
- Incorporar la pulpa de mango y la leche de coco removiendo bien.
- Llevar a ebullición, tapar y bajar el fuego. Cocinar todo durante 10 minutos.
- Al cabo del tiempo, añadir los garbanzos ya cocinados y escurridos, remover bien y volver a tapar.
- Cocer a fuego bajo durante 10 minutos más, y si se seca demasiado ajustar la cantidad de líquido añadiendo un poco de agua o caldo (rectificar de sal y pimienta).
- Al final incorporar el zumo de limón y corregir de nuevo la sal.
- Servir con cilantro o perejil fresco bien picado.
El curry de garbanzos con frutas tropicales lo puedes acompañar con una guarnición de arroz blanco, que queda muy bien con todo (preferiblemente que sea basmati). También puedes servirlo con quínoa, cuscús o mijo, y hasta una pasta corta si se te va la imaginación.
Este curry queda estupendo también con roti, el pan plano indio. Puedes añadirle unos trocitos de piña, que la mezcla de sabores te sorprenderá. Si te gusta el picante incorpórale más guindillas y no les retires las semillas ni las venas, pero ya el plato quedará muy sustancioso y especiado. Prepara esta receta y compártela con tus invitados, que se sorprenderán y querrán repetir un poco más.
