Sopa de arroz casera con toque asiático

La sopa de arroz es un plato que despierta sensaciones hogareñas. La sopa siempre recuerda a la protección familiar. En invierno, cuando hace frío, calienta, aporta calor y energía. En primavera o en verano, con calorcito, reconforta y anima la vitalidad.  Una sopa de arroz siempre es bienvenida.

La gastronomía asiática se caracteriza por la fuerte presencia de sopas. Tan es así, que en algunos países las comen incluso durante el desayuno. En otros no falta en la mesa, a veces como acompañante de otras comidas principales.  Los sabores asiáticos son muy variados, al igual que los ingredientes con los que se preparan.

Esta receta de sopa de arroz casera tiene ese toque asiático que la hace original.  Es  una sopa gourmet, de las que suelen servirse en restaurantes de categoría. Tiene la ventaja de que se puede realizar en casa y queda perfecta.

Es un plato con buenos valores nutricionales. El arroz es un cereal activador de la energía, especialmente necesaria luego de esas jornadas agotadoras que caracterizan a la vida moderna.  Su sabor y textura tan suaves, se complementan perfectamente con las salsas tipo inglesa  y de soja, que son un llamado al paladar.

Además, se integran algunas verduras que incorporan vitaminas y minerales al plato. Y el toque final es la presencia de huevos, fuentes de proteínas y de calcio.  Por lo tanto, servir esta sopa de arroz con toque asiático es atender a las necesidades nutricionales de los comensales.

Presentamos la receta.

Ingredientes:

¿Cómo se elabora esta sencilla y deliciosa sopa de arroz casera con un toque asiático?

1. Colocar en una olla 3 cucharadas de aceite y sofreír el arroz.
2. Incorporar el caldo y cocinar durante 10 minutos. Poner a punto de sal, retirar y reservar.
3. En una sartén, calentar 1 cucharada de aceite y colocar las tiras de calabaza. Moverlas y esperar a que se doren.
4. Mezclar las calabazas con el arroz y su caldo.
5. Agregar la salsa de soja y la salsa tipo inglesa.
6. Ajustar la sal y la pimienta. Si está muy seca la sopa, agregar también un poco de caldo.
7. En una sartén cocinar los huevos tipo revueltos, cortarlos en tiritas y mezclarlos con la sopa bien caliente.

Ya está lista para servir. Se puede acompañar de crutones o costrones de pan fritos. No hay dificultades en la receta, ni tampoco lleva demasiado tiempo.

Sentirás que tus comensales se reaniman desde que reciben el plato humeante anticipando todas las sensaciones.