Salsa de naranja
Esta salsa de naranja le alegrará el paladar a todos. Se trata de una mezcla exótica de sabores ácidos y dulces que acompañan bien cualquier carne. Aunque a algunos les resulte raro mezclar lo dulce y salado, es mundialmente conocida la receta del Pato a la naranja. Con un poco de creatividad, hay muchas variaciones.
El ingrediente principal de esta receta es, sin duda, la naranja. No solo por su aporte en sabor sino por su valor nutricional. La naranja es rica en vitamina C y que actúa como un antioxidante natural. Esta deliciosa fruta cítrica, originaria de Vietnam, India y China, aporta a cualquier receta su aroma único.
El consumo de naranja es muy popular en todo el mundo. En la actualidad, los mayores productores de naranjas son Brasil y EEUU, quienes la procesan y convierten en zumo. Por otro lado, un dato interesante es que el país que exporta la mayor cantidad de cítricos frescos es España; la producción española representa el 41% de la producción europea.
Con esta receta de salsa de naranja no quedará duda de que esta fruta puede consumirse de múltiples formas. Desde comerla en gajos directamente hasta en preparaciones más elaboradas como esta elaboración, que seducirá a todos con su delicioso sabor.
Ingredientes:
Cómo preparar salsa de naranja:
- Lavar y secar bien las naranjas. Rallar la piel de ambas frutas sin llegar a la parte blanca. La parte blanca tiene un toque amargo.
- Exprimir las dos naranjas.
- En un cazo colocar la crema de leche, el zumo de naranja, la piel rallada, el Grand Marnier y la sal.
- Agregar el caldo de carne, la miel, la canela y el curry. Colocar sobre fuego medio y mezclar muy bien.
- Reducir la salsa durante 15 minutos, siempre a fuego medio y sin dejar de revolver. El resultado final debe ser una crema líquida, pero con el grado adecuado de densidad.
Esta salsa de naranja puede servirse para acompañar aves, carne de ternera o de cerdo. En caso de que la preparación del plato requiera sellar las carnes, puede hacerse la salsa en la misma cacerola o cazo. También acompaña a la perfección pescados y frutos del mar; incluso puede ser una buena opción para cubrir postres o platos dulces.