Recetas de cuchara

Potaje de guisantes con jamón

Potaje de guisantes con jamón
Receta de Potaje de guisantes con jamón.

¿Te gustan los platos de cuchara caseros? No dejes de probar esta receta de potaje de guisantes con jamón. Te sorprenderá.

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El potaje de guisantes con jamón es un plato muy sencillo de preparar, pero muy potente de sabor. Es por ello que se trata de una receta perfecta para hacer en cualquier momento u ocasión, aunque es particularmente ideal para esos días en los que no disponemos de mucho ánimo para la cocina, pero aun así deseamos comer algo delicioso y nutritivo. Lo mejor de esta receta es que no requiere de una gran cantidad de ingredientes y el proceso de preparación es sumamente sencillo.

Dos de los ingredientes estrellas de esta receta, como es el caso del jamón serrano y de los guisantes, proporcionan interesantes beneficios para el buen funcionamiento del organismo. Por un lado, el jamón serrano es una magnífica fuente de proteínas de alta calidad, así como también de vitaminas del grupo B y minerales como el zinc o el hierro. Está combinación es ideal para fortalecer el sistema inmune y ayudar a la formación de glóbulos rojos.

Los guisantes también contienen hierro, un mineral que ayuda a la producción de hemoglobina. Para que el organismo pueda absorber el hierro de este alimento, es necesario consumirlo con otros alimentos ricos en vitamina C. En esta receta se utilizan tomates, perfectos para cumplir con esta función. Los guisantes frescos también tienen múltiples vitaminas como la A, C, K , B1 y B3.

Ingredientes:

  • 300 g de guisantes secos
  • 150 g de jamón serrano en taquitos
  • 1 cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • 1 zanahoria
  • 1 hoja de laurel
  • 1 cucharadita de pimentón dulce
  • 1 litro de caldo de pollo o agua
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal
  • Pimienta negra recién molida
  • Cómo preparar el potaje de guisantes con jamón:Guisantes

    1. El remojo de los guisantes es el primer paso a seguir siempre y cuando se utilicen guisantes secos enteros. En este caso, lo más recomendable es colocarlos en abundante agua desde la noche anterior. Sin embargo, también puedes utilizar guisantes partidos y, en este caso, no será necesario remojarlos porque se cocinan mucho más rápido.
    2. En una olla grande, agrega un chorrito de aceite de oliva virgen extra y lleva a fuego medio. Cuando el aceite esté caliente agrega los ajos y la cebolla previamente picada.
    3. Remueve constantemente estos ingredientes para evitar que se quemen, especialmente el ajo. Cuando la cebolla comience a transparentar agrega la zanahoria previamente pelada y cortada en rodajas delgadas. Cocina removiendo constantemente durante el tiempo necesario hasta que las zanahorias estén pochadas.
    4. En este punto, agrega los taquitos de jamón serrano y deja que se cocinen durante aproximadamente cuatro o cinco minutos, asegurándote de integrarlos con el resto de los ingredientes.
    5. Transcurrido el tiempo anterior, añade el pimentón dulce e integra. También agrega los guisantes, la hoja de laurel y cubre con aproximadamente un litro de caldo o agua. Sube la temperatura del fuego hasta que rompa a hervir y en ese momento vuelve a bajar la temperatura y deja cocinar a fuego lento.
    6. El tiempo de cocción total del potaje puede extenderse 40 o 50 minutos a fuego lento. Revisa y remueve de vez en cuando para evitar que el fondo se pegue y si observas que el potaje se queda un poco seco, siempre tienes la opción de agregar un poco más de caldo.
    7. Cuando esté listo, prueba el potaje y rectifica de sal en caso de ser necesario, ya que los taquitos de jamón suelen aportar el nivel de sal suficiente.
    8. Cuando el potaje esté listo, retira del fuego y deja reposar unos minutos antes de servir caliente.

    Información nutricional: 1007 kcal

    Tipo de cocina: Mediterránea

    Tipo de comida: Almuerzo

    Como puedes observar, este potaje de guisantes con jamón es una gran opción para hacer cualquier día en el que deseemos comer delicioso y saludable, aunque es particularmente ideal para el otoño y el invierno. ya que se trata de un plato caliente sumamente nutritivo y delicioso. ¿Te animas a prepararlo?

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