Gambas al ajillo en freidora de aire
Estas gambas al ajillo en freidora de aire son una de esas tapas en las que apetece mojar pan sin remordimientos y con una cerveza fresca cerca.
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Estas gambas al ajillo en freidora de aire son una de esas tapas en las que apetece mojar pan sin remordimientos y con una cerveza fresca cerca. Ha llegado el momento de sacarle el máximo rendimiento a nuestra freidora de aire, las patatas bravas más espectaculares o los calamares fritos con menos grasa, nos estarán esperando. Las gambas son un ingrediente que se puede convertir en el mejor aliado de una cena o comida especial. La freidora de aire nos ayudará a crear unas gambas al ajillo sin casi nada de grasa con el mismo sabor, atrévete a probarlas.
Ingredientes:
Cómo preparar gambas al ajillo en la freidora de aire
- Esta receta de gambas al ajillo en freidora de aire es muy sencilla, solo necesitamos ingredientes de buena calidad para conseguir el acabado que buscamos.
- Las gambas pueden ser frescas o congeladas, pero siempre debemos apostar por un producto de primera calidad.
- Lo idea es que sean frescas, pero en caso de ser congeladas, igual nos quedará buenas. Las sacamos del congelador con tiempo.
- Uno de los secretos para conseguir que queden siempre bien es pelarlas antes de que se descongelen del todo.
- De esta manera les quitaremos toda la piel sin problemas. A medida que las vamos pelando colocamos las gambas en un bol.
- Maceremos este delicioso marisco con el diente de ajo. Lo picamos y mezclamos con estas gambas para que adquieran su sabor.
- Le ponemos aceite de oliva para darle el punto de alegría que necesita esta receta que no necesitará grandes ingredientes de este ingrediente para freírse.
- Dejamos que esta mezcla repose durante 1 hora para que así consigamos el sabor que necesitamos.
- Para que sea más fácil freír estas gambas, las colocamos tipo pincho. Así las colocaremos bien en la cesta de la freidora de aire.
- Colocamos la freidora de aire a unos 180º y la programamos para estar activa durante 10 minutos, será el tiempo necesario para conseguir que las gambas queden fritas a la perfección.
- Serviremos esta delicia con un poco de pan y espolvoreada con perejil fresco picado. Le dará el toque verde que necesitará.
- Habremos creado las gambas al ajillo más ligeras de la historia, sin tanto aceite y con el mismo sabor de siempre. Atrévete con esta receta, es una de las mejores tapas que existen, el resultado es espectacular.
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