Zanahorias a la crema
Las zanahorias a la crema es una receta imprescindible para la operación bikini o una cena ligera ideal que nos hará ganar unos puntos hacía una estrella Michelin casera. Es muy fácil de preparar y queda buenísima. Las zanahorias normalmente las solemos comer crudas o como acompañamiento de otros platos, pero aquí se convertirán en las auténticas protagonistas. Esta hortaliza es una auténtica maravilla, de sabor dulce y muy apetecible, tiene grandes propiedades que nos ayudan a estar en forma y benefician, especialmente, nuestra piel. Existe la creencia de que son esenciales para ponernos morenos, con el verano a la vuelta de la esquina, será mejor que empecemos a comerlas ya mismo. Toma nota de cómo preparar unas zanahorias a la crema que quedan de cine.
Ingredientes:
Cómo preparar zanahorias a la crema:
- Empezamos nuestras zanahorias a la crema preparando el ingrediente principal. Limpiaremos, pelaremos y cortaremos en rodajas más o menos iguales las zanahorias. Las reservaremos mientras seguimos con la receta. Podemos reservar una zanahoria para rallarla y servirla por encima de la crema, quedará muy bien.
- En una sartén añadimos un poco de mantequilla, puedes utilizar aceite de oliva, le dará más intensidad. Mientras se derrite pelaremos y picaremos o rallaremos bien fina la cebolla. Añadiremos la cebolla a la sartén y la pocharemos un poco. Cuando empiece a estar tierna, pondremos las zanahorias.
- Le daremos unas vueltas a estos dos ingredientes durante unos tres minutos. Será entonces el momento de poner un poco de agua y cocer las zanahorias 10 minutos. Las zanahorias deberán haber absorbido toda el agua y estar totalmente tiernas.
- Cuando llegue este punto pondremos la nata líquida para cocinar. Puedes utilizar una versión light de este ingrediente o leche evaporada, mucho más ligera. Dejaremos que empiece a espesar y que coja textura, cuando tenga la consistencia de una crema podemos retirarla del fuego.
- Finalmente, rectificaremos de sal y lo pasaremos por la batidora. Nos quedará una crema suave y de una textura muy especial. Para darle un poco de color podemos servirla con un poco de perejil o cebollino picado, quedará de cine, acompañada de la zanahoria rallada.
- Estas zanahorias las puedes comer tanto en frío como en caliente, de las dos formas estarán buenísimas. Además, es un plato fácil de llevar a cualquier sitio y quedar siempre de maravilla.