Receta de Rosquillas de flan
¿Recuerdas las rosquillas que has comido en casa desde siempre? Anímate con esta receta de rosquillas de flan, te sorprenderán.
Las rosquillas son de esos dulces que generalmente se asocian a la infancia, a esas visitas a casa de la abuela donde los nietos eran agasajados y recibidos con todos esos detalles azucarados y deliciosos. Estas rosquillas de flan son una reelaboración moderna de aquellas maravillas con que nuestras abuelas nos consentían, un bocado dulce que gustará a todos en casa.
Las rosquillas tienen un origen muy antiguo (algunos dicen que se remontan al imperio romano) y los historiadores gastronómicos aseguran que buena parte de Europa y la cuenca mediterránea las conocían de hace tiempo. Sin embargo, suele decirse que vienen de España y son típicas de Semana Santa. Se fríen u hornean y la masa puede variar, pero siempre tiene forma toroidal, o sea, forma de rosca, y por eso se llaman así.
Hay quienes las confunden estas rosquillas con las famosas donas, y puede que sean parecidas en que ambas se fríen y en su forma redonda con un agujero en el centro. Pero la rosquilla es más delicada, más leve, si es que cabe esa palabra en un dulce lleno de azúcar y frito en abundante aceite.
Ingredientes:
Cómo preparar rosquillas de flan:
- Con la batidora batir todos los ingredientes menos la harina, 150 gramos de azúcar y el agua.
- Batir bien y luego agregar la harina, pero se mezcla con la mano, no con varillas. Mezclar hasta que se despegue de las manos. La masa estará pegajosa, pero será fácil de trabajar. Si es necesario añadir más harina.
- Formar una bola con la masa.
- Poner a calentar suficiente aceite en una cazuela grande.
- Formar rulos con la masa y unirlos por los extremos. El tamaño dependerá del largo de los rulos. Suelen salir muchas rosquillas.
- Cuando el aceite esté caliente ir echando las rosquillas con cuidado, y dorar por cada lado unos 2 minutos (dependerá de lo caliente del aceite).
- Sacar las rosquillas y ponerlas en papel absorbente. Luego pasarlas a una fuente y reservar.
- Para hacer el almíbar, poner los 150 gramos de azúcar y el agua en un cazo al fuego. Dejar hervir y en 5 minutos aproximadamente el almíbar estará listo.
- Bañar las rosquillas con el almíbar y después pasarlas por azúcar (opcional).
Si quieres una merienda a la antigua prepara estas rosquillas de flan. Un buen chocolate será el acompañante perfecto.