Locro argentino: la auténtica receta fácil de hacer
El locro argentino es un plato ideal para las épocas de invierno. Se come caliente y su potencial energético es sorprendente. Aquí te contamos sus pasos.
El locro argentino es un plato auténtico que tiene todo lo necesario para convertirse en un básico de nuestra cocina. Esta combinación de cereales, carnes y verduras se parece a nuestro cocido de toda la vida, es igual de contundente y de delicioso. En esos días en los que nos apetece un plato contundente, podemos experimentar con un plato típico de la cordillera Andina. Haga o no frío, coger la cuchara y descubrir nuevos sabores, texturas y acabados es siempre un placer. Atrévete a crear un locro argentino digno de un restaurante de Neuquén.
Ingredientes:
Cómo preparar un locro argentino
- La base principal de esta receta son las carnes, con la grasa de la panceta vamos a conseguir un fondo de los que no se olvidan.
- Cortamos en daditos toda la carne. Empezaremos a dorarla en la cazuela en la que vamos a cocinar esta delicia contundente.
- Mientras la panceta va cogiendo color, nos ponemos manos a la obra con las verduras, las pelamos y troceamos.
- Cuando la carne ya haya soltado un poco de grasa, será el momento de incorporar las verduras. Ellas serán la base de un guiso impresionante.
- Empezaremos por las cebollas y seguiremos con el maíz o los pimientos que necesitan menos tiempos de cocción.
- Salpimentamos la carne y la incorporamos en taquitos a este guiso. Dejaremos que vaya cogiendo color y nos aporte su mejor cara.
- Cuando esté sellada la carne, ponemos el caldo de verduras. Dejamos que se cocinen todos los sabores hasta que tengamos listo nuestro locro argentino.
- Este ingrediente será el que dé lugar a un guiso que podemos acompañar de un poco de pan o de unas empanadas argentinas que completen la receta.
- Es contundente, pero está delicioso, lo podemos fusionar o adaptar a los ingredientes que tenemos en nuestra cocina o gustos.
- Atrévete a probar un locro argentino que conquistará a los paladares más existentes, el resultado merecerá la pena, un plato de cuchara auténtico.
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