Receta de bizcocho de almendra con mascarpone y fresas

Este bizcocho de almendra con mascarpone y fresas es uno de esos dulces que siempre queda bien y nos ofrece un resultado simple y espectacular. Las fresas se convertirán en la base de una elaboración que puede llegar a ser maravillosa. La repostería es una de las tareas más relajantes que existen, una buena forma de preparar bizcochos caseros saludables en un abrir y cerrar de ojos con recetas como éstas. Perderles el miedo a las elaboraciones tradicionales es fácil, esta combinación de bizcocho de almendra fácil de preparar con una cobertura de mascarpone y fresas es la forma de disfrutar de un postre, merienda o desayuno casero espectacular.

Ingredientes:

Cómo preparar un bizcocho de almendras con mascarpone y fresas

1. Este bizcocho se empieza a preparar encendiendo el horno, lo ponemos a 180º para que esté listo a la hora de recibir este postre.
2. Aprovechamos el horno encendido para tostar las almendras, las vamos a extender en una fuente para horno para que se tuesten un poco.
3. Cuando estén listas las podemos triturar para hacer una deliciosa harina de almendras. Podemos evitar estos pasos comprando directamente la harina ya lista.
4. Ponemos en un bol la harina de almendras, le añadiremos la harina convencional que ayudará a darle un toque más esponjoso.
5. La añadimos la harina de maíz que le dará color y sabor a esta base. Este trío de harinas marcará la diferencia, incorporamos también la levadura.
6. Por otro lado, mezclamos la mantequilla con el azúcar. Creamos una base, una crema perfecta en la que vamos a añadir los huevos.
7. Uno a uno hasta que estén bien integrados, tendremos lista la base principal de esta receta repleta de buenas sensaciones.
8. Mezclamos las harinas con la levadura con esta segunda masa más líquida hasta que estén perfectamente integradas. Podemos ponerle un poco de vainilla, este paso es opcional, en su lugar también quedará muy bien un poco de limón.
9. Tendremos lista la primera masa de este bizcocho. Preparamos una fuente para horno con papel de horno para que no se pegue y horneamos a 180º hasta que tengamos el bizcocho listo. Puede tardar unos 25 minutos.
10. Mientras tenemos el bizcocho cocinándose, empezamos a montar la nata, la vamos a poner directamente de la nevera a un bol frío para que se quede más consistente.
11. A continuación, le ponemos el azúcar para que quede una nata perfecta antes de la llegada del mascarpone, un queso cremoso perfecto para postres.
12. Lavamos las fresas y las trituramos. Las añadimos con movimientos envolventes a esta masa, poco a poco hasta que estén perfectamente integradas.
13. Cuando tenemos el bizcocho listo colocamos por encima esta crema para conseguir un resultado espectacular. Solo nos quedará dejar que coja consistencia en la nevera o en el congelador.