Receta de arrufadas

Las arrufadas son unos pancitos dulces típicos de Portugal, muy parecidos a otro tipo de pan dulce llamados moletinhos de São Vicente. Son muy fáciles de hacer, los ingredientes son tan comunes que suelen estar en todas las despensas, y sirven para endulzar una tarde de buena compañía y buena charla con un cremoso café con leche. En Portugal solían consumirse en fiestas populares y días festivos y hoy en día se consiguen en algunas panaderías.

Las arrufadas, por ser tan populares, se venden en todas partes y todas las abuelas sabían elaborarlas. No es de extrañar que para algunos sea un verdadero volver a los tiempos de infancia, y más allá del idioma, el sabor es similar a muchos dulces que se hacen de este lado de la península.

Ingredientes:

Cómo preparar las arrufadas:

1. En un bol grande desmenuzar la levadura en la harina.
2. Agregar 3 huevos, la mantequilla previamente derretida, el azúcar, la vainilla, la ralladura de limón, la leche y una pizca de sal.
3. Mezclar bien y amasar de 10 a 15 minutos a mano hasta obtener una masa homogénea, lisa y suave.
4. Espolvorear un poco de harina en un recipiente, colocar la bola de masa, cubrir con un paño húmedo y dejar que leve hasta triplicar el tamaño, aproximadamente 2 horas.
5. Una vez pasado el tiempo, amasar de nuevo un poco y formar 16 porciones de 50 gramos cada una, aproximadamente.
6. Formar bolitas, y con la masa restante hacer cordones y ponerlos por encima de cada arrufada, como adorno.
7. Acomodar las arrufadas en una bandeja forrada con papel vegetal.
8. Batir el huevo restante y pincelar todas las arrufadas. Tapar con un paño limpio.
9. Reservar encima de la cocina y dejar fermentar nuevamente por una hora más, hasta duplicar el tamaño.
10. Veinte minutos antes precalentar el horno a 180° C.
11. Cuando se haya cumplido la hora del levado, hornear por 15 minutos.
12. Estarán listas cuando se hayan dorado por fuera.

Si lo deseas, después de pincelar tus arrufadas con el huevo batido, puedes espolvorear un poquito de azúcar glas sobre cada una. Les dará un dulzor adicional y la textura típica del pan dulce.

Anímate a preparar este sencillo y entrañable pan dulce portugués para tus meriendas o desayunos. A los niños les encantará y los adultos disfrutarán de un sabor familiar.