El Salvador endurece las normas escolares: peinados, uniformes y saludo obligatorio
Algunos padres y expertos consideran que la militarización de las escuelas puede limitar la creatividad


El Salvador ha implementado nuevas normas en sus escuelas públicas que exigen a los estudiantes asistir con uniforme limpio y ordenado, corte de cabello adecuado y saludo respetuoso al ingresar al aula. Estas medidas, anunciadas por la ministra de Educación, Karla Trigueros, buscan fortalecer la disciplina y el orden en el sistema educativo del país.
La ministra Trigueros, quien es capitana del ejército, ha instruido a los directores escolares a supervisar diariamente la presentación personal de los estudiantes y a garantizar el cumplimiento de estas normas. El incumplimiento por parte de los directores será considerado una falta grave de responsabilidad administrativa.
Estas medidas han generado opiniones divididas entre la población. Algunos consideran que son necesarias para mejorar la disciplina y el orden en las escuelas, mientras que otros critican que representan una «militarización» de la educación.
El presidente Nayib Bukele ha respaldado estas medidas, afirmando que son parte de una transformación educativa integral para preparar a las nuevas generaciones y elevar la calidad del sistema.
Sistema militar
La medida exige que todos los estudiantes mantengan el uniforme limpio y bien planchado, el cabello con cortes adecuados y un comportamiento respetuoso al ingresar a clase. Los directores escolares son responsables de supervisar el cumplimiento diario de estas normas, y cualquier incumplimiento puede considerarse una falta administrativa grave. La iniciativa busca fomentar la disciplina, el orden y la responsabilidad personal desde temprana edad.
Aunque la propuesta ha recibido respaldo del presidente Nayib Bukele y de diversos sectores que valoran la educación disciplinada, también ha generado críticas. Algunos padres y expertos consideran que la militarización de las escuelas puede limitar la creatividad y la autonomía de los alumnos, mientras que otros opinan que este control estricto ayudará a mejorar la convivencia y el rendimiento académico.