Strudel de peras, arándanos y nueces

La combinación de sabores del strudel de peras y arándanos es especialmente armoniosa y ambas frutas, dulces y ácidas, forman con el hojaldre y las nueces un exquisito y refrescante postre de frutas, con una textura crujiente muy interesante. Esta es una variante del strudel alemán de manzana, actualizado e incluso más delicioso que el original. Este tipo de postres son ideales para que los más pequeños de la casa disfruten del sabor de las frutas. En este caso, lo mejor es quitar el toque de oporto, para eliminar cualquier resquicio de alcohol.

La temporada ideal para preparar esta variante de strudel es el otoño, cuando se pueden conseguir peras y arándanos frescos. Fuera de temporada, puedes elaborarlo con frutas congeladas o con arándanos deshidratados, los que puedes rehidratar con agua, té u otras bebidas y zumos.

También puedes ajustar las proporciones de peras y arándanos según tus gustos, o las ofertas de temporada. Si prefieres un sabor más dulce, usa más peras, o si prefieres la acidez de las bayas, agrega más arándanos. Este postre también lleva un toque de Oporto, el que se utiliza en la masa.

Ingredientes:

Elaboración:

1. Pela las peras, quítales las semillas y los cabos, y córtalas en rodajas finas.
2. Coloca en un bol, rocía con un poco de jugo de limón, agrega los arándanos y el azúcar. Reserva.
3. En otro recipiente, combina el aceite, el Oporto y la ralladura de naranja.
4. Estira la masa en una fuente de horno y píntala con la preparación, reservando un poco para los bordes.
5. Extiende encima una mezcla de nueces trituradas y harina, luego vierte las frutas.
6. Envuelve la masa en los bordes y píntala con la mezcla de Oporto que has reservado.
7. Hornea a 180°C durante 30 minutos, aproximadamente.
8. Retira del horno y deja enfriar.

Si deseas añadir una cobertura para este pastel de sabores intensos, se recomienda un glasé ligero, el que puedes preparar con azúcar impalpable y un poco de jugo de limón.

El strudel puedes disfrutarlo a temperatura ambiente, o mantenerlo en el refrigerador, para que las frutas sean más refrescantes. Si así lo haces, notarás que con el paso de las horas, los sabores de peras y arándanos se intensificarán… si es que queda algo de strudel para probarlo.

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