Receta de Galletas de hierbabuena

Elaborar en casa galletas de hierbabuena es barato y muy sencillo. De hecho, la galleta es uno de los productos más económicos que existen siendo básicamente una mezcla de harina, azúcar, huevos y mantequilla. La creación de su receta implicó un avance importante en la cocina, la alimentación y los viajes del ser humano. Lo que caracteriza a la masa de la galleta es su ausencia de agua, constituyéndose en un alimento bastante seco. Es precisamente esto lo que permite que este alimento se conserve por más tiempo, manteniendo también su solidez. La receta es del mundo antiguo pero la primera vez que se le llamo “galette” fue en 1636. Poco a poco, este tipo de elaboraciones fueron evolucionando, hasta la amplia variedad de galletas que conocemos hoy en día.

La galleta no es el alimento más saludable, pero si es nutritiva y sacia. Tiene una ligera porción de proteína gracias al huevo aunque el resto sea básicamente carbohidratos. En todo caso, este es un bocado que nos puede ayudar a aguantar el hambre cuando salimos de casa. Comerla cada cierto tiempo no hace ningún daño y su sabor tiene fines recreativos. Por supuesto, es mucho mejor recurrir a este tipo de golosinas que a otros dulces con colorantes e ingredientes químicos. Si no conocías la galleta de hierbabuena y limón, a continuación podrás prepararla…  ¡Sigue leyendo!

Ingredientes:

Cómo preparar galletas de hierbabuena:

1. Rallar toda la cáscara del limón y reservar.
2. Picar las hojas de hierbabuena.
3. Cortar la mantequilla en dados y colocar en un recipiente.
4. Meter la mantequilla en el microondas durante 30 segundos para derretirla.
5. Batir la mantequilla y dejar enfriar hasta que se vuelva cremosa.
6. Tamizar la harina con el azúcar y un poco de sal.
7. Incorporar a la mezcla la mantequilla. Mezclar todo hasta obtener una pasta.
8. Añadir el huevo y la yema a la masa.
9. Incorporar la ralladura, la hierbabuena y el moscatel. Mezclar bien hasta obtener una bola de masa uniforme y seca.
10. Picar la bola de masa en cuatro pedazos y cubrir cada uno con papel transparente.
11. Refrigerar las porciones de masa durante unas dos horas aproximadamente para endurecerlas.
12. Colocar las porciones de masa entre dos hojas de papel para hornear y pasar el rodillo.
13. Cortar las galletas con un cortador o con un cuchillo y colocar cada una en una bandeja para hornear.
14. Precalentar el horno a 150 grados centígrados y refrigerar la bandeja con las galletas.
15. Hornear las galletas durante unos 15 minutos o hasta que sus bordes estén dorados.

Es importante mantener la refrigeración de la masa cuando no se trabaje con ella, para contribuir con su solidificación. Esto permitirá galletas más consistentes. Las galletas de hierbabuena demuestran lo mucho que se puede hacer con poco. Practica hasta obtener una masa en su punto… ¡A cocinar!