Receta de aros de cebolla crujientes al horno

Uno de los aperitivos más simples y deliciosos que existen son los aros de cebolla crujientes al horno. Normalmente se fríe este elemento, pero con una masa parecido no tenemos necesidad de añadir más grasa. La cebolla será la base de un básico para acompañar una tarde de películas o de series, una cena de tapas con amigos o un delicioso encuentro familiar. Si eres amante de todo lo rebozado, pero quieres una versión más ligera para no tener ningún remordimiento, toma nota de cómo preparar unos deliciosos aros de cebolla crujientes al horno.

Ingredientes:

Cómo preparar unos aros de cebolla crujientes al horno

1. Esta receta además de ser muy sencilla queda deliciosa, solo necesitamos hacernos con unos ingredientes básicos para poder disfrutarla.
2. Usaremos una cebolla grande que será la base de esta maravilla. Al mismo tiempo que empezamos a pelarla, encendemos el horno.
3. Ponemos el horno a 180º para que esté listo a la hora de recibir esta maravilla. Pelamos la cebolla y la cortamos en rodajas del mismo tamaño.
4. Separamos los aros de cebolla para poder rebozarlos correctamente. Si se rompen los podemos guardar para el sofrito o rebozarlos de igual forma.
5. En un bol ponemos las cuatro cucharadas de harina con el agua, batimos con un poco de agua y conseguiremos una pasta perfecta.
6. Crearemos una especie de masa para poder conseguir un rebozado impresionante. Salpimentamos los aros que tenemos listos para la acción.
7. Preparamos un plato con el pan rallado, podemos ponerle un poco de perejil para darle un poco de color a esta mezcla.
8. Untamos los aros de cebolla con la masa de harina y agua. Los pasamos por un poco de pan rallado y conseguiremos de esta manera que queden perfectamente cubiertos.
9. Preparamos una fuente para horno cubierta con papel de horno para que no se nos peguen los aros. Los vamos colocando uno al lado del otro.
10. Horneamos esta delicia a 180º durante unos 10 minutos, les damos la vuelta y continuamos 5 minutos más.
11. Apagamos el horno y dejamos que se terminen de cocinar. Los aros deben quedar hechos de dentro y crujientes por fuera.
12. Conseguiremos de esta manera un resultado impresionante en un abrir y cerrar de ojos, ligeros saludable y listos para mojar en mayonesa o en kétchup.