Scones de avena, receta sencilla
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Los scones de avena son una deliciosa opción para hacer en casa. ¿Te animas? Aquí te dejamos el paso a paso.
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Los scones de avena son típicos de la gastronomía escocesa. En la actualidad, estos son los aperitivos o snacks más populares para acompañar el té de la tarde. Por lo tanto, se acostumbra elaborarlos de muchas formas en el país galo, y lo han exportado al resto del mundo. Estos rústicos panecillos pueden prepararse con diferentes tipos de harinas y rellenos dulces o saladas. Su ingesta se popularizó en la Escocia del siglo XV y luego en Inglaterra. Con la conquista, su consumo se extendió al continente americano.
Estos scones de avena son sencillos de elaborar. De hecho, dar forma a su masa rústica es muy sencillo y no toma mucho tiempo. No existe ningún secreto y, aunque lo ideal es mezclar varios tipos de harinas, pueden realizarse solo con harina de trigo y frutos secos. Se pueden preparar versiones simples con ingredientes que abundan en la casa.
La avena es el cereal perfecto para elaborar nutritivos scones. Esto se debe a la textura arenosa que aporta a los bollos, pero lo más importante es que les agrega fibra. Además, la avena es rica en hierro y potasio, cuya ingesta fortalece el crecimiento de los músculos y huesos… ¡Aprende a elaborar estos bocadillos!
Ingredientes:
Cómo preparar Scones de avena, receta:
- Mezclar los ingredientes secos junto con la sal en un bol.
- Verter la leche con el jugo de limón en un recipiente y revolver.
- Colocar la mezcla de harinas sobre la mesa de trabajo limpia y hacer un hueco en el medio.
- Añadir la manteca e integrar hasta formar una mezcla arenosa. Amontonar en forma de volcán y volver a hacer un hueco en medio.
- Verter la leche con el limón y el huevo en el centro hueco.
- Integrar los ingredientes del centro hacia afuera. Amasar y estirar con la ayuda de un rodillo.
- Añadir el queso rallado y la rúcula finamente picada.
- Esparcir las castañas y las almendras picadas en dados pequeños.
- Amasar y estirar la masa nuevamente de forma rectangular.
- Doblar la masa por la mitad y cortar triángulos medianos para hacer los scones.
- Engrasar una placa de hornear con aceite de oliva utilizando un pincel.
- Pintar los scones con una mezcla de huevo batido y aceite de oliva.
- Hornear a 200º centígrados durante 25 minutos o hasta que estén ligeramente dorados.
Esta receta da rendimiento para seis comensales. Una alternativa es rellenar con quesos o fiambres puedes comerlos como desayuno.