Receta de costilla de cerdo al horno con miel y soja

Una costilla de cerdo al horno con miel y soja es la receta perfecta para poder disfrutar de un primer plato de carne espectacular. La carne de cerdo es una de las más deseadas del mundo, un básico imprescindible que de vez en cuando nos permitirá disfrutar de un capricho de lo más especial. La costilla es una parte con el punto de grasa y la textura ideal para los amantes de la carne. Le daremos un sabor entre dulce y salado, gracias a una combinación ganadora. La miel y la soja serán las encargadas de cubrir una costilla de cerdo de restaurante.

Ingredientes:

Cómo preparar una costilla de cerdo al horno con miel y soja

1. Esta receta es muy fácil de tener lista, perfecta para esos momentos en los que se necesite una aportación extra de energía. La carne de cerdo tiene esa gracia que pocas carnes poseen. Intentaremos que sea de la máxima calidad posible.
2. En un bol vamos a poner la salsa de soja, siempre será el doble que de miel. Si queremos hacer una porción más grande lo tendremos en cuenta.
3. La miel la podemos calentar un poco al microondas si está muy compacta. Conseguiremos de esta manera que se integre mejor en una cobertura realmente impresionante.
4. Con la miel más disuelta la incorporamos a la salsa de soja sin dejar de remover. De esta manera crearemos el fondo ideal para una carne de cerdo muy especial.
5. Preparamos la costilla de cerdo. Lo ponemos en una fuente para horno. Con la ayuda de un pincel o directamente untamos toda la pieza. Podemos hacerle unos cortes a la pieza para que quedé mucho mejor.
6. Dejamos que marine unos minutos o incluso horas en la nevera. Es importante este paso para que tenga todos los sabores bien integrados.
7. Ponemos el horno a 120º horneamos la pieza una hora más o menos. Pasado este tiempo subimos la intensidad del horno hasta 180º. Tendremos el cerdo una hora más en el horno.
8. Cuando veamos que está dorada y de dentro este perfectamente cocinada la retiramos del horno. El cerdo es mejor que quede bien cocinado para poder comerse con total seguridad.
9. Servimos esta maravilla con unas patatas o un puré que acabe completando una receta con mucha personalidad. Solo nos quedará probarla y disfrutarla con la mejor compañía posible.