Helado de queso y yogur, receta casera

El helado de queso y yogur es probablemente el helado más fácil de elaborar. De hecho, se trata de un producto que fue comercializado por algunas empresas estadounidenses durante la segunda mitad del siglo XX. Podría decirse que esta receta es básicamente yogur congelado con algo de azúcar y otros acompañantes. Se cree que la primera compañía que vendió este tipo de producto fue Dannon. Con el tiempo, esta propuesta comenzó a perfeccionarse y a ganar muchos adeptos. Lo cierto es que esta es una forma de comer helados bastante saludable y nutritiva.

Esta propuesta de helado de queso y yogur es de sencilla elaboración por la naturaleza de sus ingredientes principales. Generalmente, cuando se elaboran helados a partir de proceso tradicional se debe trabajar mucho con la leche y la nata. De hecho, ese tipo de preparación implica batir los ingredientes constantemente para lograr la cremosidad. La ventaja del queso crema y los yogures griegos es que ya tienen la cremosidad y consistencia adecuada. De esta forma, al recurrir a estos elementos se eliminan algunos de los primeros pasos que implica elaborar este postre frío. Por supuesto, el resultado final es de un sabor bastante diferente a los sabores de siempre.

El helado de queso y yogur griego es muy alimenticio por la cantidad de probióticos que aporta. Ciertamente, este tipo de propuesta puede ser relativamente más ligera que comprar helados procesados. Más allá de eso, siempre se tratará de una mezcla con alto contenido de grasas debido a que incorpora derivados de la leche. A continuación, verás como se prepara uno de los postres más rápidos pero cumplidores que existen… ¡Sigue leyendo!

Ingredientes:

Cómo preparar un helado de queso y yogur:

1. Colocar el azúcar en un bol.
2. Verter el yogurt griego y mezclar con el azúcar y la crema de leche hasta obtener una mezcla homogénea.
3. Añadir el queso crema y batir toda la mezcla con ayuda de una batidora eléctrica.
4. Tapar la mezcla con papel film y meter en el congelador durante una hora.
5. Sacar el helado, remover el papel film y batir el helado para romper los cristales de hielo.
6. Volver a repetir el procedimiento anterior durante unas dos veces más para obtener un helado cremoso.

Lo mejor de esta combinación es que puede combinarse con otros elementos como el chocolate. También es factible utilizar yogures de sabor o zumos naturales.