Galletas fritas, rellenas de crema de queso

Las galletas fritas, rellenas de crema de queso son las de toda la vida, que llevaban la tradicional crema pastelera, pero en su lugar se rellenan de una exquisita crema de queso. Esta es una variación muy interesante para renovar estas galletas tan familiares, hasta el punto de que casi cada familia las hace según recetas transmitidas de generación en generación. Nuestras abuelas las preparaban a menudo.

Estas exquisitas galletas suelen rellenarse, como ya comentamos, de crema pastelera, pero también de crema de cacao. Suelen aparecer por todos lados cuando se acerca la semana santa y para esta receta es preferible conseguir galletas María de hojaldre. No obstante, igualmente puede usarse para esta receta cualquier otro tipo de galletas que encontremos en el mercado, o bien unas que elaboremos en casa de forma artesanal. Cuanto más casero sea todo, más calidad tendrá el conjunto final.

Ingredientes:

Cómo preparar galletas fritas, rellenas de crema de queso:

1. Preparar la crema de queso: batir el queso crema.
2. Cuando esté suave, añadir la mantequilla pomada y la cucharadita de vainilla.
3. Incorporar el azúcar sin dejar de batir.
4. Al obtener una crema homogénea, cubrir el bol con papel film y refrigerar por media hora.
5. Colocar una galleta y poner encima dos cucharadas de la crema de queso en el centro. Tapar con otra galleta y presionar ligeramente, para pegarlas bien.
6. Poner una cacerola con abundante aceite.
7. En un cazo entibiar la leche, echar el chorrito de ron.
8. Batir los huevos.
9. Mezclar en un bol azúcar y canela.
10. Cuando el aceite esté listo, remojar en la leche tibia las galletas tipo sándwich en la leche tibia y luego pasar por el huevo
11. Freír unos segundos por cada lado y sacar, dejando las galletas en papel absorbente para retirar el exceso de grasa.
12. Rebozar las galletas en la mezcla de azúcar y canela, y refrigerar hasta que se vayan a consumir.

Anímate a preparar estas galletas fritas, rellenas de crema de queso. Puedes tomarlas acabadas de hacer, aunque te garantizamos que están mejor después de algunas horas en la nevera, por lo que es recomendable que las hagas de un día para el otro.

Recuerda no pasarte con la fritura, apenas unos segundos, pues la crema de queso se puede derretir por completo. Son una verdadera delicia, y el contraste de dulce y salado sorprende agradablemente. Acompaña con un vaso de leche o un chocolate cremoso. Es una opción ideal para tomar de merienda.