Croquetas de jamón y queso sin bechamel, receta fácil de preparar sin lactosa
Estas deliciosas croquetas de jamón y queso sin bechamel son el descubrimiento del siglo.
Estas deliciosas croquetas de jamón y queso sin bechamel son el descubrimiento del siglo. Se puede conseguir crear un bocado impresionante sin necesidad de recurrir a la bechamel. Conseguiremos un equilibrio de sabores impresionante y sin apenas esfuerzo gracias a la patata. Este ingrediente les dará a nuestras croquetas un interior cremoso similar al de la bechamel. El jamón y queso serán los auténticos protagonistas de este interior que quedará enmarcado por el clásico exterior crujiente. Si te apetece un aperitivo distinto, toma nota de estas increíbles croquetas de jamón y queso sin bechamel.
Ingredientes:
Cómo preparar croquetas de jamón y queso sin bechamel
- Estas croquetas además de estar de vicio son muy fáciles de preparar, no necesitan nada más para brillar que unos ingredientes básicos.
- De hecho, nos pueden ayudar los más pequeños de la casa a crear unas croquetas que les encantarán.
- No vamos a conseguir el punto cremoso con la bechamel, a veces es complicado crear una masa con la textura
- La patata será la que nos ayude a conseguir el resultado perfecto. Las cocinaremos a la velocidad de la luz en el microondas.
- Lavamos las patatas y las ponemos enteras en el microondas a máxima potencia unos 15 minutos. Comprobamos si están o no listas.
- Dejaremos que se enfríen antes de ponernos con las manos en la masa. Pelamos las patatas y las ponemos en un bol.
- Salpimentamos al gusto y le añadimos la mantequilla. Es mejor que esté calienta la patata para que se funda mejor con la mantequilla.
- Podemos usar aceite de oliva en lugar de mantequilla, nos quedará igual de buena la masa de la croqueta.
- Picamos el jamón bien finito y se lo añadimos. Incorporamos también el queso rallado sin lactosa o convencional que más nos guste.
- Una yema de huevo le dará la textura final que buscamos a esta masa. Les podemos dar forma a las croquetas y dejar en el congelador, son un buen fondo de nevera.
- Batimos el huevo, ponemos un plato con pan rallado. Preparamos la sartén con el acete de oliva o de girasol.
- Cuando está el aceite caliente, rebozamos las croquetas en el huevo y el pan rallado. Freímos hasta que estén doradas.
- Colocamos sobre papel absorbente para que eliminen el exceso de aceite. Servimos con un poco de salsa de tomate o una cerveza fresquita, estarán de vicio estas croquetas de jamón y queso sin bechamel.
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