Ensalada de rúcula, manzana y canónigos

La ensalada de rúcula, manzana y canónigos renueva una costumbre del campo. En realidad, el consumo de canónigos se ha esfumado en el tiempo y aun cuando no se tiene claro cuando se incorporó en la alimentación humana, su ingesta es de antigua data. La primera descripción formal de este vegetal, también llamado “lechuga de campo”, se produjo en un diario eclesiástico alemán a finales del siglo XVI. Aunque su cultivo formal se inició en los monasterios europeos, esta planta crecía de forma silvestre en muchas regiones frías de Francia, Holanda e Italia, donde era consumida por los campesinos. Es importante que incluyamos verduras crudas en nuestros menús diarios, y la mejor opción son las ensaladas.

Esta lechuga de pequeñas hojas es la acompañante perfecta para otros vegetales. Su sabor ligeramente ácido complementa perfectamente con verduras muy variadas como la calabaza, los espárragos, los tomates, las zanahorias, los rábanos y el apio, entre otras. Por lo general, se come cruda, como en esta receta, donde realza el ácido de las manzanas y el tomate, aligerando el sabor amargo de la rúcula.

La ensalada de rúcula, manzana y canónigos es una fuente de antioxidantes. Esto se debe a que, tanto la rúcula como el canónigo son ricos en vitaminas A, C y E, así como, en fósforo, manganeso, hierro, yodo y potasio, además de ácido fólico. Por esta razón, su ingesta frecuente contribuye a prevenir la anemia. A continuación, explicamos cómo preparar esta receta… ¡Sigue leyendo!

Ingredientes:

Para la ensalada:

Para el aderezo:

• 50 mililitros de vinagre de manzana
• 30 gramos de semillas de mostaza
• 50 mililitros de aceite de oliva
• Sal y pimienta

Cómo preparar la ensalada de rúcula, manzana y canónigos:

1. Colocar en un bol el aceite, el vinagre y las semillas de mostaza.
2. Integrar muy bien estos ingredientes del aderezo y salpimentar. Reservar
3. Lavar los canónigos, escurrir y colocar en una ensaladera.
4. Cortar la cebolla en láminas finas y agregar al bol.
5. Mezclar la cebolla con los canónigos y verter una parte del aderezo. Integrar todo.
6. Picar el tomate en cuartos y laminar.
7. Colocar el tomate en el centro de la ensaladera sobre los canónigos y las cebollas.
8. Ir poniendo también la manzana en cuartos, eliminar el corazón y las semillas. Laminar y acomodar en el bol.
9. Lavar la rúcula, escurrirla y colocar en la ensaladera.
10. Verter el resto del aderezo antes de servir.

Esta es una receta muy fácil y rápida de preparar. En menos de 15 minutos lograrás ofrecer un plato de vegetales muy saludables y suculentos. La ensalada de rúcula, manzana y canónigos es exótica y vistosa. Por eso tu mesa lucirá como la de un lujoso restaurante… ¡A cocinar!