Guasaca venezolana: la salsa que acompaña a cualquier alimento

La guasaca venezolana es el acompañante que más abunda en muchas mesas de ese país. Conocido en la jerga popular caraqueña como “guasacaca”, es un condimento útil para muchas comidas. El alimento al cual se le asocia más es la empanada, sobre todo aquellas cuyo relleno es de algún tipo de carne. Su sabor es característico, marcado, pero se realiza con ingredientes muy baratos. Muchas personas antes de ir al trabajo se paran en un sitio de comida y piden alimentos fritos acompañados con esta salsa.

Esta preparación es bastante similar al guacamole mexicano. No obstante, la guasaca se diferencia por su textura mucho más líquida. Además, los guacamoles mexicanos suelen ser preparados con más picor. En el caso de la gastronomía venezolana, se diferencia esta salsa verde del complemento picante. En la “guasacaca” no se incorpora el tomate, siendo más habituales hierbas como el cilantro y el perejil.

La guasaca venezolana es una salsa bastante saludable y ligera. De hecho, todos sus ingredientes son naturales y promueven una mejor digestión. El aguacate tiene características nutricionales excepcionales, incorporando ácidos grasos naturales. Lo mejor de este complemento es que logra un gran sabor, sin recurrir a picantes o ingredientes grasos. En Venezuela, algunas personas le colocan un poco de mayonesa para favorecer su consistencia y sabor. Más allá de esta modalidad, este es un producto alimenticio provechoso. A continuación, verás cómo se prepara… Sigue leyendo.

Ingredientes:

Cómo preparar guasaca venezolana:

1. Lavar, pelar y retirar la semilla del aguacate.
2. Cortar el aguacate en trozos y triturarlo en una licuadora.
3. Picar la cebolla, el ajo y pimiento verde en dados extremadamente delgados.
4. Mezclar la cebolla, el ajo y el pimentón verde con el aguacate y triturar un poco.
5. Picar finamente el cilantro y el perejil e incorporar a la mezcla del aguacate. Triturar en la licuadora.
6. Incorporar el vinagre y un poco de aceite. Mezclar bien.
7. Sazonar con sal y pimienta.
8. Refrigerar un poco para conservar y mejorar su consistencia.

Una buena idea consiste en colocar un poco de mayonesa para darle un toque más cremoso a esta salsa. No obstante, aquellos que prefieren evitar las grasas pueden prepararlo solo con vinagre y un poco de aceite. En cualquiera de los casos, una salsa ideal para acompañar una gran variedad de preparaciones.