Receta de pudin blanco de almendras

Este pudin blanco de almendras es un postre rápido que se prepara en un abrir y cerrar de ojos. Un dulce que tiene todo lo necesario para poder triunfar. Por un lado, tenemos las almendras, un fruto seco básico de sabor dulce que se convertirá en el fondo de este pudin blanco. Usaremos un poco de maicena para espesar esta receta, mezclada con la leche y un toque especial o sorpresa conseguiremos crear el punto extra de sabor que necesitamos. El ron se convertirá en un buen compañero de viaje para este pudin con un chupito le daremos la gracia que lo hará destacar.

Ingredientes:

Cómo preparar un pudin blanco de almendras

1. Esta receta se cocina muy rápidamente y quedará de maravilla. Nos ponemos manos a la obra con la leche. Ponemos la leche en un cazo.
2. Calentamos la leche hasta que esté preparada para recibir al resto de los ingredientes, empezamos por el azúcar.
3. El punto de azúcar de este postre de cuchara es personalizado. Podemos ponerle más o menos en función de nuestros gustos.
4. Añadimos la almendra. Una buena harina de almendra conseguirá que se cree el fondo de sabores perfecto.
5. Ponemos la maicena. Si queremos que nos quede un pudin más delicado, podemos deshacerla con un poco de leche caliente previamente.
6. Dejamos que se vaya espesando. Sin dejar de remover, la maicena deberá quedar bien compacta para que quede realmente bien.
7. A medida que vamos removiendo va cogiendo textura esta maravilla. Le ponemos el toque de ron para que nos quede un pudín con una gracia especial.
8. Preparamos los moldes individuales. Deshacemos el chocolate en el microondas, podemos ponerle un poco de caramelo si nos gusta más.
9. Colocamos el chocolate en el fondo del molde. De esta manera daremos un contraste muy especial a una receta que hará historia, es tan sencilla y deliciosa.
10. El punto del pudin será cuando haya espesado en el fuego. Debemos tener en cuenta que una vez esté en los moldes también espesará un poco más.
11. Vertemos el pudin en cada uno de los vasitos. Ponemos a enfría y esperamos a que haya cogido algo de consistencia. Servimos con unas almendras fileteadas por encima. Tendremos listo un postre sencillo y delicado en un abrir y cerrar de ojos. Solo nos quedará probarlo.