Ensalada de hinojo con gambas

El hinojo es una planta muy versátil de la que se aprovecha absolutamente todo. Es la única especie del género Foeniculum, y se puede encontrar en todas las tierras templadas del mundo aunque es nativa de la Europa meridional, específicamente de las costas mediterráneas, donde crece a los lados de los caminos. Desde siempre se la utilizó como hierba aromática. En el caso de esta ensalada de hinojo con gambas, se usa el bulbo y si se desea se pueden usar también sus hojas. Además del gusto que ofrecerá el hinojo en tu ensalada, el aroma será verdaderamente fresco y apetecible.

Su uso también es medicinal, el cual tiene una historia muy antigua; incluso Carlomagno reclamó campos para cultivar hierbas aromáticas para cocinar y para curar, e incluyó expresamente el feniculum, que a día de hoy se ha identificado como la Foeniculum vulgare, es decir, el hinojo que todos conocemos. Su sabor es delicadamente anisado. Los tallos y las hojas se usan como hierba aromática, las semillas, secas, se utilizan como especie y el bulbo como hortaliza, tal y como se hace con la ensalada de hinojo con gambas.

Ingredientes:

Cómo preparar la ensalada de hinojo con gambas:

1. Cocer las gambas en agua hirviendo con sal durante 3 minutos.
2. Sacar y reservar, y cuando estén frías pelarlas y retirarles la tripa. Reservar en la nevera.
3. Mientras, lavar bien los dos bulbos de hinojo, quitarle la primera capa superior y cortar en juliana fina (se puede hacer con una mandolina, si se tiene). Reservar las hojas.
4. Cortar la cebolla en juliana fina.
5. En un recipiente mezclar la miel, el vinagre, el zumo de limón, sal y el aceite de oliva. Agitar hasta emulsionar la vinagreta.
6. Verter sobre el hinojo y la cebolla en una ensaladera, tapar con papel film y refrigerar de 2 a 4 horas.
7. Para servir, remover un poco el hinojo y la cebolla con el aliño, poner las gambas encima, remover, ajustar de sal y pimienta y adornar con las hojas del hinojo.

Si quieres puedes acompañar esta deliciosa ensalada de hinojo con gambas con rodajas finas de aguacate cortadas justo antes de servirla. Queda perfecta como entrante o entreplatos y en un menú de fiesta se hará un sitio especial.

Otra interesante idea, es que puedes sofreír las gambas en 2 cucharadas de aceite de oliva en lugar de cocerlas en agua, y en este caso, añádele este aceite a la ensalada y sírvela tibia.