Brocheta de pixin y langostinos: cóctel de sabores marinos en tu plato

Instrucciones fáciles para preparar brochetas de pixín y langostinos

• Prepara los ingredientes: Lava bien las verduras y córtalas en trozos del tamaño de los dados de pescado.
• Marina el pescado y los langostinos: Mezcla en un bol el aceite, el zumo de limón, el ajo, sal, pimienta y perejil. Añade los trozos de pixín y los langostinos, y deja que se impregnen durante 20-30 minutos.
• Monta las brochetas: Alterna trozos de pixín, langostinos y vegetales en los palos. Trata de equilibrar los colores para que luzcan atractivas.
• Cocina: Asa en la plancha, parrilla o sartén bien caliente durante unos 3-4 minutos por cada lado, hasta que el pescado esté blanco y firme, y los langostinos rosados.

Información nutricional: 979 kcal

Tipo de cocina: Mediterránea

Tipo de comida: Almuerzo o cena

Consejos para conseguir unas deliciosas brochetas de pixín y langostinos

• Corta los ingredientes de forma uniforme para que se cocinen al mismo ritmo.
• No cocines en exceso el marisco, ya que puede quedar seco o gomoso.
• Agrega el marinado justo antes de montar si vas a preparar con antelación, para evitar que el pescado se deshaga.
• Puedes pincelar las brochetas con el marinado sobrante mientras se cocinan para potenciar el sabor.

Maridaje ideal para brochetas de pixín y langostinos

Estas brochetas combinan a la perfección con vinos blancos frescos y aromáticos como el Albariño, Godello o un Chardonnay sin crianza. También puedes optar por un cava brut o una sidra asturiana seca si quieres mantener un perfil más local y tradicional. En cuanto a acompañamientos, van muy bien con arroz salvaje, ensaladas de cítricos, patatas al vapor con hierbas o couscous con verduras asadas.

Cómo conservar y presentar la brocheta de pixín y langostinos

Si te sobran brochetas cocinadas, puedes guardarlas en un recipiente hermético en la nevera durante 1 o 2 días. Para recalentarlas, lo ideal es hacerlo al horno o en una sartén con tapa a fuego medio para conservar su jugosidad. A la hora de servir, puedes decorar con unas gotas de limón fresco, perejil picado o incluso acompañarlas con una salsa suave de yogur con ajo y limón. Sirve sobre una cama de rúcula o arroz para una presentación completa y apetecible.