Azúcar glass

El azúcar glass es un ingrediente que se usa con mucha frecuencia en la repostería. Se caracteriza por su textura; al ser un tipo de azúcar pulverizado, es sumamente suave y delicada al tacto. Este azúcar molido se usa fundamentalmente para acabados de distintos postres. En algunas preparaciones se espolvorea para darle un retoque delicado y acentuar el dulce de la preparación.

Los nombres que lleva pueden variar de un lugar a otro. En algunos lugares se le conoce como azúcar impalpable; en otros sitios es conocido como azúcar en polvo, azúcar flor o azúcar nevado.

El azúcar glass también es muy utilizada para decoraciones de tartas. De igual forma se usa en la elaboración de merengues, para montar las claras de huevo. También se emplea en la elaboración de mazapanes. El sabor del azúcar glass se puede considerar casi irresistible, ya que resulta agradable para la mayoría de las personas. También es un ingrediente que resalta otros sabores si se usa en pequeñas cantidades. Es curioso que, para resaltar el toque salado de alguna preparación, haya que agregar un punto de azúcar.

La principal propiedad nutricional que tiene el azúcar en el organismo es el aporte de energía. Esta energía se asimila con facilidad y estimula el cerebro, así como el conjunto de músculos del cuerpo. También activa y tiene efectos sobre el sistema nervioso. El azúcar glass es un buen aliado en el caso de los deportistas de alta intensidad. Las personas con rutinas de ejercicios que duren más de 90 minutos, deben reponer azúcar y sodio. Esto suele lograrse por medio de ingesta de bebidas isotónicas que pueden prepararse de manera casera.

Hay que recordar que el consumo abundante y descontrolado de azúcar es perjudicial para la salud y puede causar diabetes. No hay problema en tomarlo, pero siempre de forma moderada.

Ingredientes:

250 g de azúcar blanco

Una licuadora o trituradora

Media cucharadita de fécula o harina de maíz

Un colador fino para tamizar

Cómo preparar azúcar glass:

1. Incorporar los 250 g de azúcar blanca al vaso de la licuadora o trituradora y molerlo durante un minuto y medio. Apagar y remover la azúcar con una cuchara de madera que esté bien seco.
2. Agregar la media cucharadita de fécula o de harina de maíz. Volver a triturar durante un minuto y medio moviendo ligeramente la licuadora. Apagar. A continuación, pasar por un colador fino.

El azúcar glass puede ser ese toque especial para que un postre sea perfecto. ¡Puedes cocinarlo en casa, no te llevará tomará más de unos minutos!