Salsa de ajo y perejil: cómo prepararla en pasos sencillos

La salsa de ajo y perejil es una receta sencilla pero muy sabrosa que se ha ganado un lugar especial en cocinas de todo el mundo, especialmente en la mediterránea. Su intensidad aromática y frescura la hacen ideal para acompañar carnes, pescados, mariscos, verduras asadas o incluso para darle un toque especial al pan tostado. Además, se prepara en pocos minutos con ingredientes básicos que suelen estar en cualquier despensa. A continuación, te mostramos cómo hacerla, algunas variantes para adaptarla a tu gusto y consejos para conservarla en óptimas condiciones.

Ingredientes para la salsa de ajo y perejil

Para preparar una salsa de ajo y perejil clásica, necesitarás los siguientes ingredientes:

Estos ingredientes son básicos, pero puedes ajustarlos según tu preferencia. El ajo aporta un sabor fuerte y penetrante, mientras que el perejil ofrece frescura y color. El aceite de oliva actúa como base y ayuda a integrar los sabores.

Procedimiento: cómo preparar la salsa de ajo y perejil paso a paso

1. Lavar el perejil: Lava bien el perejil bajo agua corriente para eliminar cualquier impureza. Seca con papel de cocina o una centrifugadora de verduras.
2. Pelar los ajos: Quita la piel de los dientes de ajo. Si prefieres un sabor menos intenso, puedes blanquearlos brevemente en agua caliente.
3. Picar los ingredientes: Puedes hacerlo a mano con cuchillo o usar una picadora o procesador de alimentos. Mezcla el ajo y el perejil hasta que estén bien integrados.
4. Añadir el aceite: Vierte el aceite de oliva poco a poco mientras mezclas hasta conseguir una textura homogénea.
5. Sazonar: Añade sal, pimienta y unas gotas de limón si deseas un toque ácido. Prueba y ajusta al gusto.

Variantes de la salsa de ajo y perejil

Aunque la receta tradicional es deliciosa tal cual, puedes personalizarla según tus preferencias o el plato que vayas a acompañar. Algunas ideas:

• Con vinagre: Sustituye el limón por vinagre de vino blanco o balsámico para un sabor más potente.
• Con guindilla: Agrega una pizca de chile o guindilla para un toque picante.
• Con frutos secos: Añade nueces o almendras molidas para una textura más rica.
• Con yogur: Mezcla la base con un poco de yogur natural para obtener una salsa más cremosa, ideal para ensaladas o carnes frías.

Consejos para conservar y recalentar la salsa

La salsa de ajo y perejil se conserva bien en la nevera dentro de un recipiente hermético durante hasta una semana. Cubre la superficie con una capa fina de aceite para evitar la oxidación. No es recomendable recalentarla directamente, ya que el calor puede alterar su sabor y textura. Si deseas usarla caliente, agrégala al final de la cocción o directamente sobre el plato ya servido.

Información nutricional de la salsa de ajo y perejil

Esta salsa es naturalmente baja en carbohidratos y rica en grasas saludables gracias al aceite de oliva. El ajo aporta compuestos antioxidantes y propiedades antibacterianas, mientras que el perejil es una buena fuente de vitamina C, vitamina K y hierro. Una porción de 15 gramos contiene aproximadamente:

• 120 calorías
• 13 g de grasa (en su mayoría insaturadas)
• 0,5 g de carbohidratos
• 0,3 g de proteína

Ideal para quienes buscan sabor sin añadir azúcares ni ingredientes procesados.