Galletas de chocolate sin azúcar añadido, receta dulce deliciosa

A pesar de que siempre tendemos a pensar que las galletas tienen muchas calorías, lo cierto es que se pueden cocinar galletas de chocolate sin azúcar añadido. Estas galletas crujientes tendrán un intenso sabor a chocolate al no llevar nada de azúcar añadido. Es una buena opción si tienes antojo de dulce pero prefieres no descuidar la dieta. Esta receta, además, es muy rápida de preparar, por lo que en apenas media hora tendrás la masa hecha y horneada. Eso sí, antes de meterla al horno, recomendamos dar un golpe de frío en el frigorífico.

Si eres amante de las galletas y del chocolate, disfrutarás muchísimo estas galletas de chocolate sin azúcar ya que el sabor es espectacular. ¡No te pierdas la receta a continuación si quieres llegar a sorprender a todos!

Ingredientes para las galletas de chocolate sin azúcar

Elaboración

1. En un recipiente amplio, coloca la harina de trigo, la almendra molida, el cacao puro en polvo, la levadura química y el eritritol. Mezcla bien todos los ingredientes. Si se quiere un sabor más suave de chocolate, se puede sustituir parte del cacao por harina o por almendra molida.
2. Añade la mantequilla cortada en daditos o ligeramente ablandada, el huevo y la leche, mezcla bien todos los ingredientes hasta que se amalgamen, termina de amasar con las manos en la mesa de trabajo, tiene que quedar una masa firme y que no se pega en las manos.
3. Forma una bola con la masa y déjala reposar en el frigorífico tapada, para que se endurezca un poco, bastarán unos 20 minutos. Después, retira la masa de las galletas de chocolate de la nevera y haz porciones de 20 gramos.
4. Haz bolitas con todas las porciones y después aplánalas ligeramente, colocándolas en la bandeja del horno cubierta con papel vegetal. Para terminar, coloca un disco de chocolate en el centro, presionándolo ligeramente.
5. Introduce la bandeja de las galletas en el horno precalentado a 180º C y hornea durante unos 15-20 minutos. Cuando estén hechas, habrán cambiado ligeramente de color y, aunque estarán blanditas al tacto, al enfriarse se endurecerán. Retira la bandeja del horno y deja que pierdan un poco de temperatura, después pásalas a una rejilla para que se enfríen.