Salsa de queso ligera

Salsa de queso ligera, para acompañar nachos, brócoli, o cualquier ensalada. En otro artículo de Okdiario-recetas hicimos salsa putanesca, de hoy te contamos como preparar en poco tiempo una salsa cremosa muy versátil, ¡la puedes usar con muchas recetas!

¿Por qué nos gusta tanto el queso?

El queso es uno de los alimentos más vendidos del mundo, incluso se especuló en distintas publicaciones que podía tener un potencial adictivo. Por ejemplo en un estudio de la Universidad de Michigan, los los investigadores descubrieron que la pizza es uno de los alimentos más adictivos. Al llevar queso la pizza y contener el queso unas sustancias químicas llamadas casomorfinas, el paso siguiente era considerar el queso como un alimento adictivo.

Los científicos descartan esta afirmación, pero si especifican que el queso al igual que otros alimentos estimula nuestros circuitos de recompensa en el cerebro. Los mismos circuitos que estimulan drogas como la cocaína. Sin embargo no se puede decir porque alguien le guste mucho el queso ‘sea un adicto al queso’. Lo cierto es que su sabor y textura cremosa hacen que el queso sea un alimento atractivo. Hay muchos tipos de quesos y son cómodos de utilizar, desde el queso en lonchas para los sándwiches, el queso crema para untar o el rallado, para espolvorear.

Para preparar esta salsa usamos queso gouda light que tiene un 16% de grasa frente a los 27 % que suelen tener el queso gouda convencional. Además como base para la salsa usaremos leche evaporada que solo tienen 6% de grasa frente a 30-40% que tiene la nata tradicional.

Salsa de queso ligera

Ingredientes

150 g de queso Gouda light (lo tienes en el Lidl y otros supermercados)

1 cucharada de harina de maíz o Maizena

1 taza de leche evaporada (alternativa ligera a la nata)

Sal y pimienta blanca

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Preparación

Comenzamos rallando el queso, añadimos en un vaso 60 ml de leche evaporada fría y diluimos la cucharada de maizena.

El resto de la leche evaporada lo vertemos en un cazo y lo ponemos a fuego flojo, cuando la leche comience a calentarse añadir el queso gouda light rallado, junto a un poco de sal y pimienta blanca. Remover sin cesar hasta que el queso se derrita por completo, y ¡listo!

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Elena Bellver