Receta de sándwich de pollo gourmet

Este sándwich de pollo gourmet es uno de los bocados más deliciosos y saborosos jamás vistos. Con una base de pollo que podemos reutilizar de otras recetas o cocinar para la ocasión podemos crear un bocado nunca visto. El pan de molde acabará siendo la base de algo que puede llegar a emocionar a más de uno. Si te apetece un capricho y quieres conseguir un sándwich ideal para disfrutarlo frente al televisor o en la terraza, toma nota de esta receta. La carne de pollo cobrará una nueva vida de la mano de esta sencilla elaboración.

Ingredientes:

Cómo preparar un sándwich de pollo gourmet

1. Nos ponemos manos a la obra con la carne de pollo. Podemos aprovecharlo de una receta anterior, un pollo asado que tengamos en la nevera o cocinarlo desde cero.
2. Preparamos una sartén con un chorrito de aceite. Salpimentamos el pollo y lo troceamos. Cocinamos el pollo hasta que esté tierno, lo troceamos más con un tenedor.
3. Incorporamos el vino tinto y el cacao en polvo. Dejamos que evapore el vino y le añadimos el caldo. Cocinamos durante unos 10 minutos.
4. Agregamos la maicena para que ayude a espesar el conjunto. Mezclamos bien y si nos gusta más finito podemos triturarlo todo. Tendremos listo el pollo que irá dentro de este sándwich de lujo.
5. Continuamos con el queso. Vamos a preparar un queso de untar o Philadelphia de una forma distinta. Lo ponemos en el vaso de la batidora.
6. Añadimos las dos cucharadas de curry. Batimos todo hasta tener una delicada crema de queso con un toque oriental.
7. Con todo listo seguimos con el pan de molde. Podemos usar el tipo de pan que más nos guste. Lo vamos a preparar para recibir esta maravilla.
8. Untamos con la mantequilla y tostamos a la sartén. Cuando haya cogido color y textura retiramos del fuego, empezamos a crear el sándwich.
9. Montamos el sándwich, ponemos un poco del queso aromatizado y rellenamos con el pollo que tenemos listo, podemos incorporar unos brotes verdes.
10. Cortamos en diagonal y servimos con unas patatas y una bebida muy fría. Conseguiremos hacer en casa fácilmente un sándwich digno de un buen restaurante, solo nos quedará probarlo.