Receta de cordero asado al horno, la receta que nunca falla

¿Todavía no has elegido la cena de la noche de fin de año? Aquí te ofrecemos una tradicional receta de cordero asado al horno. Este plato nunca falla.
Cuartos traseros de pollo al horno: receta jugosa
Batatas asadas: receta fácil y saludable
Pechugas de pollo al horno: receta sencilla
La receta de cordero al horno de la abuela es, quizá, la más representativa de ese legado culinario que pasa de generación en generación sin necesidad de grandes técnicas. Su secreto siempre ha estado en la simplicidad: buen producto, horno suave y tiempo. Nada más.
En esta guía repasamos cómo hacer cordero al horno como la abuela, con ese toque de hogar que convierte un asado en un plato inolvidable.
¿Por qué cordero?
Si el debate continúa abierto y aún es necesario elaborar argumentos de por qué elegir cordero asado al horno antes que cualquier otra receta, a continuación, razones extra. Más allá de la ya comentada de que se trata de una preparación sin mayores complicaciones.
Lo primero que se debe apuntar es que se trata de un tipo de carne roja que proviene directamente de ovejas jóvenes. Quizá este punto resulte un poco doloroso para algunos comensales sensibles, pero mejor no preguntar por el cochinillo.
Un asado con sello familiar
Cuando se habla de un cordero al horno estilo abuela, se hace referencia a un asado honesto, que respeta la esencia del producto y evita artificios innecesarios. La base de esta preparación coincide con lo que podríamos llamar un cordero al horno receta tradicional, donde el objetivo es obtener carne tierna por dentro y una piel crujiente y dorada.
Lo más habitual es utilizar pierna o paletilla, piezas perfectas para un cordero al horno receta familiar que se cocina lentamente hasta que prácticamente se separa sola del hueso. Esta es también una receta casera de cordero al horno que se adapta muy bien a cualquier ocasión especial.
Si buscas acompañamientos ligeros para completar el menú, puedes considerar unas berenjenas al horno fáciles.
Ingredientes esenciales
La magia de un cordero al horno tradicional de la abuela reside en la sencillez:
Estos ingredientes forman la base perfecta para un asado que nunca falla.
Paso a paso: así se logra un asado perfecto
- La clave de un cordero al horno receta tradicional no está en complicarse, sino en respetar los tiempos y la hidratación de la carne.
- Preparar la pieza. Haz pequeños cortes en la carne e introduce láminas de ajo. Sazona con generosidad y añade un poco de aceite.
- Precalentar el horno. 180–190 ºC es una buena temperatura inicial.
- Colocar la carne en una bandeja con agua o caldo. El líquido evita que el asado se reseque y contribuye a formar una salsa deliciosa.
- Hornear lentamente. Calcula unas dos horas, volteando la pieza a mitad del tiempo. Si quieres un toque más dorado, puedes subir la temperatura los últimos 10–15 minutos.
- Regar de vez en cuando. Este gesto, tan propio de las abuelas, ayuda a mantener la jugosidad característica.
Si estás preparando un menú más amplio, otros platos al horno pueden complementar perfectamente este asado, como muslos de pollo al horno: receta sencilla y jugosa.
También una merluza al horno rápida y sabrosa.
Consejos para que siempre salga bien
Un buen cordero al horno estilo abuela se distingue por su textura melosa y su sabor profundo. Para lograrlo:
- No tengas prisa: el cordero mejora con cocciones largas.
- No lo reseques: añade agua cuando sea necesario.
- No abuses de las especias: la carne debe ser la protagonista.
- No olvides el reposo: unos minutos fuera del horno afinan la textura.
Estas pautas explican por qué este asado sigue siendo una receta infalible en tantas casas.
Si buscas más ideas de carnes al horno para alternar con el cordero, puedes explorar el lomo de cerdo al horno: receta casera y jugosa.
También la paleta de cerdo al horno: receta fácil y deliciosa.

Cómo comprar cordero
Más allá de elegir la receta adecuada, el problema para muchos se centra en este punto. Cómo (y dónde) comprar un buen cordero. A pesar de lo tradicional y que su consumo ya no se limita exclusivamente a las festividades de fin de año, no es del tipo de carne que se come todos los días o que se puede conseguir en cualquier parte. Al menos no con la suficiente calidad.
En los supermercados determinar el origen del producto es complicado. Además, que se corre el riesgo de que la frescura no sea uno de sus atributos. Lo mejor es acudir con un carnicero de confianza, y si no se conoce alguno, preguntar entre los familiares y amigos.
De cualquier forma, el etiquetado debe incluir información precisa sobre la procedencia de la carne. Si aún lo anterior genera dudas, siempre es importante realizar una revisión ocular exhaustiva. La carne fresca es firme y no presenta humedad.
Si vas a preparar cordero asado al horno para la cena de fin de año y el total de comensales es superior a cuatro, solo debes saber que son 500 gramos por cada persona.